María Pérez, Mariano García y Sara Gallego, mejores bazas de un equipo español con pasión por competir
MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Mundial de atletismo al aire libre arranca este viernes 15 de julio en la ciudad estadounidense de Eugene, donde España apelará a un equipo joven y ambicioso para sumar en el medallero, tirando de garra y con la marcha como gran baza, en un evento que contará con la mayoría de estrellas y campeones olímpicos de las 49 disciplinas.
La cita, la más importante desde los Juegos de Tokio del pasado verano, tendrá como escenario el histórico y renovado Hayward Field, el estadio de la Universidad de Oregón con un aforo pequeño de 12.600 personas. Así, Estados Unidos acogerá desde el viernes y hasta el 24 de julio por primera vez un Mundial -no organizaba un gran evento de atletismo al aire libre desde los Juegos de Atlanta 96-, marcado por la ausencia de Rusia tras la invasión de Ucrania.
La selección española viaja a Eugene con ilusión de seguir creciendo, garantizando pasión y esfuerzo como tiene acostumbrado en los grandes eventos recientes. A pesar de ir con un equipo con poca experiencia por su juventud -más de la mitad de la expedición se enfrenta a su primer Mundial-, la mayoría llega muy entonado y podrían dar la sorpresa en Hayward Field.
El equipo español no quiere volver de Eugene sin medalla, como ya ocurriera en Londres 2017. Para ello, se escuda en un equipo sin grandes líderes y en los más de 90 récords de España batidos en lo que va de 2022. María Pérez, Sara Gallego, Álvaro de Arriba, Mariano García, junto a atletas experimentados como Adel Mechaal, Javier Cienfuegos -atleta con más actuaciones internacionales (39)- o Marc Tur, son algunos de los nombres propios de la selección.
España acude a Eugene con las ausencias sensibles de Orlando Ortega, lastrado por lesión, Ana Peleteiro, embarazada; ambos con serias opciones de medalla; y Jordan Díaz, recién nacionalizado y con la mejor marca mundial del año en triple salto (17.87), por lo que la marcha será una de las alternativas más favorables. Así, la selección española, con una expedición de 56 atletas -18 más que en la pasada edición y el mismo número que en Londres 2017; la tercera cifra más alta de la historia- intentará igualar e incluso superar los 11 finalistas de los últimos Juegos.
La granadina María Pérez, campeona de Europa, representa una de las posibilidades más consistentes en el 20 km marcha al llegar a la final de la prueba como la segunda mujer más rápida del mundo este año (1:27:40). También en esta distancia, los españoles Álvaro Martín y Diego García, cuarto y sexto en Tokio, respectivamente, intentarán en Eugene luchar por las medallas, con los japoneses Koki Ikeda y Toshikazu Yamanishi como favoritos, ya que el campeón olímpico Massimo Stano probará en los 35 km.
Los 35 km marcha también serán una oportunidad para Miguel Ángel López, campeón mundial de 20 km en Pekín 2015 y bronce en Moscú 2013 y cuarto favorito corriendo por debajo de las 2 horas y 28 minutos, y ya sabe lo que es subirse al podio este año, tras quedar tercero en el Mundial por equipos de Muscat en marzo. Le acompañará un experimentado Marc Tur con opciones mucho más limitadas.
Sin el equipo de maratón como una de las grandes novedades, con el Europeo también en el horizonte, los 400 metros vallas se antojan como otra alternativa atractiva para el aficionado español. Sara Gallego llega al Mundial después de destrozar en el Campeonato de España de Nerja su récord de España (54.34), un tiempo que le permite competir en Eugene como la décima mejor atleta del mundo y tercera europea en una prueba que tendrá a la estadounidense Sydney McLaughlin como dominadora (51.41).
También participará en el 4x400 mixto como plusmarquista de España absoluta en pista cubierta (3:18.90 en 2022), la mejor marca mundial de una prueba en la que en Eugene estarán además Óscar Husillos, Iñaki Cañal, Samuel García, Eva Santidrián y Laura Hernández, con ganas de que la velocidad siga dando alegrías.
Las miradas estarán también en el campeón del mundo de 800 metros en pista cubierta en Belgrado, Mariano García, aunque algo tapado este verano por encima del 1:46.00 pero siempre impredecible, acompañado de Álvaro de Arriba (1:44.85), campeón de España en Nerja en 2022, y Adrián Ben (1:44.93), a más de una segundo de los favoritos, los argelinos Djamel Sedjati y Yassine Hethat, y los franceses Benjamin Robert y Gabriel Tual.
Por otro lado, la convocatoria española provocó cierta polémica, que de manera indirecta 'solucionó' el positivo en COVID de Adel Mechaal. El catalán fue inscrito en 1.500 y 5.000, en detrimento del granadino Ignacio Fontes, que fue tercero, por delante del propio Mechaal, en la primera distancia en Nerja, pero no entró en la lista. Esta decisión no gustó al atleta, que protestó, junto a su entrenador, en redes sociales.
Finalmente, Mechaal, que rozó medalla en el Mundial de Londres 2017, dio positivo en coronavirus y se cayó de la convocatoria para el 'milqui', donde Mohamed Katir podría ser un tapado interesante para España, con tiempo para correr en el 5.000, más avanzado el Campeonato, ya recuperado aunque con la incógnita de cómo será su estado físico tras la enfermedad.
El salmantino Mario García Romo, nuevo campeón de España de 1.500 y uno de los debutantes con la selección, sabe muy bien lo que significa correr en Hayward Field, ya que recientemente fue segundo en la NCAA. También han competido en esta pista el propio Fontes y los atletas convocados que participaron en el Mundial Sub-20 que acogió este estadio en 2014: María Pérez, Fátima Diame, Carlos Mayo, Diego García Carrera y Laura García-Caro.
En el plano internacional, los focos estarán en la venezolana Yulimar Rojas, entre algodones pero favorita en el triple salto, a pesar de solo tener un salto en 2022. Tampoco faltará a la cita el hombre récord de la pértiga, Mondo Duplantis, que buscará su primer título mundial al aire libre. Ryan Crouser, Athing Mu, Joshua Cheptegei, Letesenbet Gidey, Sifan Hassan, entre otros, son los campeones olímpicos que participarán en Eugene, con el protagonismo de los anfitriones estadounidenses, entre los que destaca Allyson Félix, que pondrá fin a su carrera en Hayward Field, con la opción de añadir una nueva medalla a las 18 que ha logrado en Mundiales.
