TURÍN (ITALIA), 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
La atleta española Arantza Loureiro se despidió de los Europeo de Turín tras lesionarse la rodilla derecha en su primer intento en la competición de salto de longitud, dejando huérfana la participación española en esta prueba, sin representantes en categoría masculina.
La bilbaína solo pudo completar el primer salto, pero cayó en mala posición y su rodilla derecha sufrió las consecuencias. Entre lágrimas por el dolor, Loureiro pidió asistencia médica para ver si podía forzar su retorno a la competición, pero finalmente abandonó el tartán turinés afectada por una visible cojera.
Por otro lado, los hermanos España, Jesús y Francisco, junto con Sergio Sánchez, completaron el triplete español que disputará mañana la final de los 3.000 metros en los Europeos de Turín, completando un pleno que fue de eliminaciones en los 400 metros, donde quedaron eliminados Santi Ezquerro, Mark Ujakpor, Antonio Reina y Natalia Romero.
De esta forma, el fondo español clasificó a sus tres primeros finalistas, las primeras opciones de medalla, que deberán refrendar mañana en la final que se disputará a las 17.15 horas. Sergio Sánchez, muy concentrado, marcó el segundo mejor tiempo entre las dos series, mientras que los hermanos España dominaron la otra semifinal.
"Vengo en un momento de forma muy bueno, soy un rival a tener en cuenta de una vez por todas, hoy he corrido frenado. Estoy en condiciones de mejorar marca y de dar una alegría, aunque mañana de poco valdrán los entrenamientos", afirmó Sánchez en declaraciones a 'TVE'.
Dos de sus grandes rivales mañana serán compatriotas. Jesús España, bronce en Birmingham 2007, mostró su satisfacción porque dominó la semifinal y pudo "economizar esfuerzos de cara a la final". "La primera criba la hemos pasado bien, pero la batalla seria será mañana, se verán las cartas de cada uno, quién esté bien y quién no", avisó.
Su hermano Francisco se alegró porque ha dejado atrás los problemas respiratorios que venía arrastrando. El menor de los España confesó que se ve "un escalón por debajo" de los otros dos españoles, por lo que, pasando a la final, siente que ya ha cumplido su "objetivo importante".
SIN OPCIONES EN 400 METROS
Peor le fueron las cosas a la delegación española en 400 metros, ya que los cuatro representantes se quedaron fuera de las semifinales: Santi Ezquerro, Mark Ujakpor, Antonio Reina y Natalia Romero no contemplaron opciones para seguir en Turín.
Alejado de su habitual prueba de 800 metros, Reina ni siquiera pudo finalizar su carrera porque sufrió un pinchazo en el gemelo derecho a falta de cien metros, reproduciendo una vieja dolencia. "He intentado seguir pero era imposible, me dolía muchísimo. Ya se me rompió hace dos años, espero que no sea para mucho y estar bien para el verano", deseó Reina.
Pese A que sí acabaron, nada pudieron hacer Santi Ezquerro (47.45) ni Mark Ujakpor (47.59). El riojano sufrió una patada fortuita al que restó importancia como "un lance de carrera más", recordando que "en pista cubierta hay carreras perras". Por su parte, el madrileño aseguró que su objetivo estaba "cumplido". "La pista cubierta no es lo mío", apuntó.
En categoría femenina, Natalia Romero quedó eliminada pese a marcar una nueva plusmarca personal (54.36). La jienense marcó el decimoquinto mejor crono, pero lejos del duodécimo registro (53.94), que daba el acceso a las semifinales. Con todo, se mostró satisfecha y no quiso poner excusas.
"Pasar era muy, muy difícil, pero tenía la oportunidad de hacer mejor marca y lo he conseguido. Estoy contenta, podía haber mejorado más, pero también podía haberlo hecho bastante peor. La pista es un poco blandita pero todas corremos en el mismo sitio así que estamos iguales", se sinceró Romero.
JACKSON QUIÑÓNEZ Y GLORY ALOZIE, ELIMINADOS EN LAS SEMIFINALES DE 60 METROS VALLAS
Los velocistas Jackson Quiñónez y Glory Alozie quedaron eliminados hoy en las semifinales de 60 metros vallas de los Europeos de Atletismo de Turín, cerrando las opciones de medalla de la delegación española en esta primera jornada.
A Quiñónez, finalista en los Juegos Olímpicos de Pekín, le faltaron apenas tres centésimas para colarse en la final tras parar el cronómetro en 7.71 y cosechar el sexto puesto en la segunda semifinal. El atleta de origen ecuatoriano acusó la presencia de más favoritos en su serie, ya que su tiempo le bastaba para pasar holgadamente a la final si hubiera corrido en la primera semifinal.
"Era una serie muy complicada de pasar, es una lástima. Me voy inmensamente triste por no haber dado mas de lo que puedo, sé claramente que lo puedo hacer, pero es muy duro estar a un nivel competitivo. Y se ha pasado con una marca inferior a la que traía", se lamentó Quiñónez, que no quiso "poner excusas" a su eliminación en declaraciones a 'TVE'.
En este sentido, el velocista espera "aprender de los errores para trabajar de cara al futuro", aunque sabe que no será fácil. "Estoy inmensamente decepcionados. Espero sobreponerme de esto. He hecho todo lo posible de corazón", aseguró el atleta, que acusó el "desgaste mental".
Tampoco pudo clasificarse para la final femenina Glory Alozie, mermada por problemas de isquiotibiales. La atleta de origen nigeriano concluyó en última posición su semifinal con un crono de 8.21. Nada más acabar su participación en Turín, Alozie reconoció no estar "bien físicamente".
"Ha sido porque no estoy bien físicamente. Quiero correr, pero ,los 'isquios' me tiran y no me dejan. La final estaba al alcance porque nadie esta corriendo mucho comparado con otros años. Yo he querido correr, pero no he podido, lo siento mucho por mi familia", se sinceró la velocista.
