DESCONECTA, 27 Nov.
El racismo sigue siendo noticia en el fútbol y no nos libramos de él, a pesar de que estamos en el siglo XXI. El jugador venezolano Emilio Rentería sufrió en sus propias carnes insultos racistas provenientes de las gradas chilenas, este pasado fin de semana, cuando se enfrentaban los equipos de San marcos de Arica y Deportivo de Iquique.
Rentería no pudo más y se echó a llorar en el terreno de juego después de soportar constantes gritos, insultos y malas palabras que los aficionados chilenos le dedicaron durante toda la primera parte. Estas dedicatorias fuera de todo tono y ética se desarrollaron justo después de que el venezolano marcara un gol para el Arica y lo celebrase.
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Un afectado Rentería se acercó a hablar con el árbitro, Julio Bascuñán, para comentarle su desesperante situación mientras se secaba las lágrimas con la camiseta. La afición chilena no cesó sus insultos, después de varios avisos por megafonía, por lo que se produjo la suspensión inmediata del partido. Un hecho insólito de escuchar en los tiempos de hoy en día.
El jugador contó a BBC Mundo que "nunca antes en sus 14 años de carrera había sufrido abusos por ser negro, hasta que llegó a Chile". El suceso le dejó tan impactado que después de que se enterara su madre y le llamara "no sabía qué decirle", confesó.
La decisión de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile anunció este martes una "implacable acción", con posible sanción contra el Deportivo Iquique.
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