EDIZIONES, 15 sept.
"Lávate las manos" es, probablemente, una de las órdenes que más repetimos a nuestros hijos a lo largo de la vida. Como adultos, sabemos la importancia de ello pues es a través de las manos una de las vías por donde se transmiten los gérmenes y, por tanto, las enfermedades. Pero, ¿hasta que punto nuestros hijos son conscientes de ello?
Donna Gill Allen, una profesora en Grays Creek, Carolina del Norte, quiso enseñar a sus alumnos la importancia de lavarse las manos con un experimento que terminó haciendo viral en Facebook, donde lo compartió en un principio para sus compañeros de profesión.
El experimento requería únicamente de unas rebanadas de pan de molde y unas bolsas de plástico tipo zip. Con estos dos elementos, y un poco de paciencia, Allen trató de explicarles lo rápido que se propagan los gérmenes de nuestras manos.
En primer lugar, se seleccionan tres rebanadas de pan. Delante de los niños, se coloca una de las rebanadas en una bolsa de plástico típica de bocadillos con los guantes puestos. Después, se etiqueta esa rebanada como "controlado". A continuación, se lavan las manos con agua y con jabón y se procede a colocar otra rebanada en una bolsa, que se etiquetará como "limpio". Finalmente, se va pasando una rebanada por la clase para que cada alumno pueda tocarla y se coloca en una bolsa que se etiquetará como "sucio".
Es cuestión de tiempo observar cómo el pan va evolucionando debido a los gérmenes. Y los resultados son más que suficientes para hacerles entender la importancia de lavarse las manos.
