VALLADOLID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la CEOE, José María Cuevas, considera que los efectos de la reforma laboral se verán "pronto" al haberse impulsado la conversión de contratos temporales en indefinidos, por lo que será más rápida la decisión en las empresas.
Cuevas, que asistió en Valladolid a la entrega de los Premios Cecale de Oro, explicó que mientras en la reforma de 1997 se intentó que los nuevos puestos de trabajo fueran más indefinidos de lo que eran, en esta ocasión se trata de la conversión de unos contratos en otros, por eso será más rápida la decisión de las empresas "porque funcionan con trabajadores que tienen de forma temporal".
"Ahora se incentiva, sobre todo con las propias concesiones que se ha hecho en cuanto a la conversión para el contrato de fomento de empleo con un sistema de indemnizaciones por despido diferentes va a suponer unos efectos más rápidos", dijo el presidente de la patronal.
En cuanto a la situación empresarial del país, Cuevas aseguró que en general se sigue manteniendo un "buen ritmo" tanto de actividad como de crecimiento y creación de empleo, también con la ampliación de la población activa a los inmigrantes, las mujeres y los jóvenes, una tendencia de los últimos años.
Pero para el presidente de los empresarios lo que más va aumentando son los "desequilibrios" que conviven con el proceso de crecimiento.
"Hay una actividad y un crecimiento de la economía muy condicionado por la inflación", que, al igual que la actividad y el crecimiento, que crecen el doble que la media de la Unión Europea, también crece en la misma proporción. "Es uno de los factores muy preocupantes", añadió.
Cuevas considera que la actividad económica está muy basada en dos grandes pilares como es el consumo, la demanda interna, "basada excesivamente en el endeudamiento de las familias y también de las empresas", y en la actividad fundamental de la construcción.
"Últimamente han aumentado un poco más las exportaciones y las inversiones y ese camino es el que hay que fortalecer más para mantener el equilibrio", dijo el presidente de la patronal.
Así, para recuperar la balanza comercial considera que hay que "recuperar el proceso de deterioro de la competitividad que se viene soportando y que se produce desde los últimos tres ó cuatro años".
Para ello, cree que hay que arreglar el problema de la inflación, el desequilibrio de costes y de precios, lo que supone mayor productividad, menores costes imputables a la producción, que el gasto público también se adecue y no produzca efectos inflacionarios "como indudablemente está produciendo" y fiscalmente no sólo se incentive el consumo sino también el ahorro, algo abandonado en los últimos tiempos.
En cuanto a la situación de Castilla y León, considera que es similar a la del resto de España, aunque con la singularidad de que hay comarcas o zonas locales "que avanzan mucho menos incluso que retroceden o su población se reduce de forma preocupante", algo que no es sólo un problema económico sino que responde a muchas circunstancias, algunas de ellas sociológicas.
