Una caída del crudo del 50% reduce un punto la inflación y eleva hasta un 1,1% el PIB el segundo año

Actualizado: domingo, 5 abril 2009 15:50

El abaratamiento tiene efectos positivos sobre la demanda, la contratación y la inversión


MADRID, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

Un descenso del 50% en el precio del crudo está teniendo un efecto "amortiguador" en el actual contexto de "recesión económica mundial", y en el caso de España ejerce una "rápida" presión a la baja de cerca de un punto en la inflación y contribuye, al cabo de dos años, a elevar el Producto Interior Bruto (PIB) en hasta un 1,1%.

Este cálculo aparece recogido en el Boletín Económico del Banco de España de marzo, que asegura además que la caída del crudo desde los 150 dólares en julio de 2008 a 40 dólares a comienzos de 2009 "ha permitido un acusado descenso de la inflación" y "amortigua la contracción de la actividad y el empleo".

Entre los efectos positivos ya apreciados del descenso, figura la reducción de costes para las empresas y una caída de la renta de las familias menos acusada en términos reales que en el escenario contrario, de altos precios del crudo.

No obstante, al comentar los efectos de segunda vuelta de la caída del crudo, el Banco de España advierte de que, por debajo de un determinado umbral de inflación, los efectos positivos del abaratamiento del crudo empiezan a ser menos apreciables.

MÁS IMPACTO QUE EN LA UE.

Junto a esto, constata que los efectos en la variación del precio del crudo sobre la inflación son más apreciables en España que en la media de la Unión Europea debido a su menor fiscalidad sobre los combustibles y a su fuerte dependencia energética.

Este factor, que puede ser positivo o negativo en función de si el petróleo baja o sube, hace que, mientras en España la inflación cae un punto con descensos del 50% del crudo, en la media de la UE esta caída sea de nueve décimas.

EFECTOS POSITIVOS SOBRE EL EMPLEO.

El Banco de España constata efectos de segunda vuelta en la fluctuación del crudo. Según uno de sus modelos de simulación, "una caída del precio del petróleo produce un abaratamiento de las importaciones de este producto que motiva una reducción de los precios a los que se enfrentan los consumidores y una caída de los salarios negociados", segura.

Posteriormente, los hogares recuperan poco a poco su capacidad de consumo, lo que provoca una mayor demanda y, con ello, más contratación y mayor inversión empresarial.