BARCELONA, 18 Feb. (EUROPA PRESS)
Las exportaciones de cava, con un aumento del 2,6%, ayudaron a mantener las ventas en 2007, año en el que los elaboradores lograron vender 224,9 millones de botellas --el 56% en el exterior-- y lograron una facturación de 952,7 millones euros, pese al descenso del 3,13% en las ventas en España.
Las ventas totales representaron un "empate técnico" respecto al año pasado, según el presidente del Consejo Regulador del Cava, Gustavo García Guillamet, ya que en 2007 se vendieron 41.000 botellas más que en 2006, un 0,02% más.
Guillamet presentó hoy los resultados del sector de 2007, donde se observa que las ventas de cava en España cayeron un 3,13% en 2007, ya que se dejaron de vender 5,8 millones de botellas en el mercado interior, que supone un 44% de las ventas, una caída que "sorprendió" al sector, explicó Guillamet. El descenso se debió a dos factores.
Por un lado, dos empresas elaboradoras catalanas abandonaron la producción de cavas de gama baja, lo que ha supuesto un descenso de 4,3 millones de botellas, un factor "positivo", según Guillamet, ya que la elaboración de estos cavas "no es rentable" y, además, implica un cambio de modelo hacia la "apuesta del sector por cavas de gama alta".
Guillamet aseguró que el precio "deseable" del cava deberían estar "por encima de los seis euros", y que los precios de oferta "escandalosos" alrededor de dos euros la botella "deberían desaparecer del mercado", ya que "desprestigian" el producto.
Por otro lado, Guillamet manifestó que empresas elaboradoras de cava radicadas fuera de Catalunya dejaron de vender 1,5 millones de botellas, situación que debe ser "vigilada de cerca" por el Consejo Regulador para que estas compañías "repitan las cifras anteriores" positivas.
Destacó que el boicot de 2005 "distorsionó absolutamente" el mercado del cava, y que ahora se está volviendo a una "situación de normalidad". En 2008, aseguró que el Consejo Regulador espera "mantenerse y hasta crecer" en ventas, aunque sean "incrementos pequeños".
DESCENSO DE LAS VENTAS EN ALEMANIA.
Guillamet aseguró que en Alemania "se han resuelto los problemas" de exportación --en 2006 se vendió un 18,51% menos debido a que la compañía distribuidora alemana de Freixenet, Eckes, decidió retirarse del negocio--, y justificó el descenso de las ventas del 10,5% de 2007 a que "no ha dado tiempo" a recuperar las cifras positivas.
Aún así, Alemania continua a la cabeza como principal consumidor de cava, con 41 millones de botellas.
En el resto de los mercados, Guillamet destacó que, excluyendo Alemania, las ventas globales de cava crecieron un 10,35%. Las ventas crecieron un 5,3% en Gran Bretaña --con 32,7 millones de botellas--, un 8,4% en Estados Unidos --con 14,4 millones de botellas--, y en Bélgica y Luxemburgo un 51,19% (entre los dos países consumieron 6,2 millones de botellas).
AVANCE HACIA LA DESESTACIONALIZACIÓN.
Guillamet aseguró que según un informe de la consultora Nielsen, en 2007 se confirmó la tendencia del sector a la "desestacionalización", ya que en la campaña de Navidad se vendió un 39,48% del total, cuando hace unos años la proporción estaba en el 50%.
En cuanto a la distribución del consumo de 2007, explicó que en el área metropolitana de Barcelona y en el área 1 --que incluye Catalunya, Baleares y Aragón-- se consumió el 45% del total de cava vendido en España.
Asimismo, destacó un "freno" en el crecimiento de consumo de champán en España, con una cuota de participación en el mercado del 2% y un aumento de las ventas del 9%, nueve puntos por debajo de 2006.
