ROMA, 5 Dic. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -
La composición del consorcio empresarial Compañía Aérea Italiana (CAI) está sufriendo algunos cambios de última hora a pocos días del cierre definitivo de la operación de compra sobre Alitalia, que está previsto para el próximo 12 de diciembre.
Según la prensa italiana, tres de los socios que hasta ahora habían manifestado su intención de participar en la operación se han echado para atrás. Se trata del fondo Clessidra, el armador de MSC Cruceros, Gianluigi Aponte, y el fondo Findim.
Sin embargo, la familia Angelucci, que es propietaria de clínicas y edita los periódicos 'Libero' y 'Riformista', estaría dispuesta a entrar en el consorcio con una inversión de unos 60 millones de euros, según informó el diario económico 'Il Sole 24 Ore'.
El motivo de estos cambios está en las incertidumbres sobre el éxito de la operación, teniendo en cuenta la precaria situación en que se encuentra la compañía, que además de haber declarado su estado de insolvencia, acumula una deuda de 1.248 millones de euros.
La salida que más preocupa es la de Aponte, teniendo en cuenta que era uno de los cuatro socios que se había dicho dispuesto a invertir 100 millones de euros, la cuota máxima que han llegado a arriesgar los empresarios.
Pese a todo, Air France-KLM, que, según la prensa, será finalmente el socio internacional que entrará en la nueva Alitalia, estaría dispuesta a invertir 200 millones de euros, con una cuota del 20%.
El primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, ha organizado una cena mañana por la noche para celebrar el éxito de la operación. El misterio estará en ver la lista de invitados, dados los cambios de última hora que ha sufrido el consorcio.
Después de numerosos aplazamientos e incertidumbres, los nuevos propietarios asumieron este lunes todos los costes de la compañía. Sin embargo, el cierre definitivo de la operación tendrá lugar el próximo 12 de diciembre, mientras que para el despegue operativo, habrá que esperar hasta después de Navidad, es decir, mediados del próximo mes de enero.
El consorcio CAI ha adquirido la deficitaria aerolínea por 1.052 millones de euros, de los que 427 serán pagados en efectivo y el resto se utilizarán para saldar parte de la deuda que acumula la compañía y que, según los últimos datos, asciende a 1.248 millones de euros.
El comisario extraordinario de la compañía, Augusto Fantozzi, emitió hoy un comunicado en el que confirma que el próximo 12 de diciembre tendrá lugar la cesión de la compañía. Además, detalla que la aerolínea ha despedido ya a 45 directivos.
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