BARCELONA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El comité de empresa de Hayes-Lemerz se opuso hoy al cierre de la planta de Sant Joan Despí (Barcelona) por considerar que se trata de una decisión política dentro del grupo, más que por motivos financieros, según señaló en un comunicado conjunto firmado por las secciones sindicales de CC.OO., UGT y CGT.
El fabricante norteamericano de componentes para el automóvil Hayes Lemmerz anunció hace diez días su decisión de cerrar la factoría de Sant Joan Despí, dedicada a la producción de llantas de aluminio, y despedir a sus 141 empleados.
Según el comité, la empresa aportará este año un millón de euros para la fábrica de Manresa (Barcelona), y destinará entre siete y diez millones de euros en los próximos años.
Por ello, mostró su incomprensión por la no continuidad de Sant Joan Despí, e instó a sindicatos, empresa y Generalitat catalana a desbloquear "una situación que, más de tipo industrial o financiera, comienza a teñirse de cariz político".
Una de las sospechas de los sindicatos es que Hayes Lemmerz busque unificar su actividad en Cataluña en la factoría manresana, ya que algunos directivos ya comparten el mismo cargo en ambas fábricas catalanas.
Hayes Lemmerz fabrica llantas para diversas marcas automovilísticas, entre las que se encuentran Ford, Renault y Nissan.
