Da por concluida la actuación de la Agencia Tributaria en el caso, aunque no descarta volver a colaborar con la Fiscalía Anticorrupción
MADRID, 2 May. (EUROPA PRESS) -
El director de la Agencia Tributaria, Luis Pedroche, apuntó, en una entrevista concedida a Europa Press, que el presunto fraude fiscal en Liechtenstein pone de manifiesto que a nivel internacional "existe un problema de intercambio de información con los paraísos fiscales".
En este sentido, avanzó que "se está intentando, con los organismos multilaterales y desde la propia Comisión Europea, avanzar en la firma de convenios de intercambio de información que hagan transparentes los rendimientos que puedan existir en este tipo de paraísos".
Desde el punto de vista interno, Pedroche aseguró que "la regulación española en materia de parísos fiscales es muy exigente". "Tanto es así, que la OCDE, frecuentemente, pone como ejemplo de exigencia la regulación española", añadió, antes de asegurar que España "tiene una buena normativa que le permite actuar".
LA INVESTIGACIÓN PROSIGUE SIN LA AGENCIA.
En el caso concreto de Liechtenstein, y a la espera de las conclusiones de la investigación en curso, la Agencia Tributaria, que fue la encargada de remitir a la Fiscalía Anticorrupción la información sobre los 80 depósitos bancarios correspondientes a 198 titulares, no descarta volver a realizar actuaciones relacionadas con la operación, si bien, por el momento, da por concluida su aportación al caso.
"Es ahora el ámbito judicial, concretamente, la Fiscalía Anticorrupción, la que debe continuar con la investigación y concluir la existencia o no de un delito de blanqueo de capitales o de evasión de impuestos, sin perjuicio de que la Agencia Tributaria colabore y esté abierta a cualquier petición de auxilio, colaboración o peritaje", aseveró Pedroche.
Así, preguntado por si se prevé la realización de registros por parte de la Agencia, como ha sucedido en países como Alemania, para obtener más información, Pedroche indicó que de momento están descartados.
Asimismo, el director de la Agencia Tributaria señaló que, aunque la Agencia "sabe quienes eran las personas y la cuantificación de los depósitos de Liechtenstein", no puede revelar este tipo de datos, ya que podrían poner en peligro la investigación que cursa la Fiscalía.
De hecho, preguntado por la posibilidad de que esta 'estrategia' pueda generar cierta sospecha entre la ciudadanía por la posible ocultación de conocidas fortunas, Pedroche defendió el proceder de su departamento frente a otros países europeos, que sí han dado nombres y apellidos, argumentando que es un método que ha dado buenos resultados en anteriores ocasiones.
Del mismo modo, el director de la AEAT rehusó precisar si el montante del fraude, en el caso de los españoles podría situarse por encima de las cuantías declaradas en países como Italia (400 millones) o Alemania (1.000 millones).
MARGEN PARA NUEVAS MEDIDAS.
Por otro lado, Pedroche afirmó que el endurecimiento de las penas por delito fiscal, la consideración de la actuación a través de un paraíso como un agravante o la apliacación de un mayor gravamen en los movimientos de fondos que tengan como origen o destino uno de estos lugares "son alternativas que hay que estudiar" para prevenir futuros casos de fraude fiscal.
De hecho, aseguró que "en algún momento se producirá una revisión del delito fiscal", ya que, en su opinión "es un ámbito en el que se debe seguir reflexionando y en el que se deben hacer propuestas concretas en esta legislatura".
Sin embargo, el director de la AEAT descartó premiar a aquellos que denuncien un delito fiscal. Según argumentó, esta prima, empleada hasta la reforma de la Ley General Tributaria de 1985, fue debatida durante la elaboración del Plan de Prevención del Fraude, pero la "conclusión definitiva" de aquel debate fue que "no está claro que el establecer el premio por denuncia mejore el resultado".
