ZARAGOZA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Unión General de Trabajadores (UGT), Cándido Méndez, afirmó esta mañana en Zaragoza que es "claramente positivo" que el crecimiento económico de España durante 2007 se haya situado en un 3,8 por ciento respecto al año anterior, y achacó el descenso de tres décimas del último trimestre a la desaceleración del subsector de la construcción de vivienda libre.
En el transcurso de una rueda de prensa, Méndez subrayó que de la desaceleración de este subsector "no se puede extraer ningún tipo de análisis catastrofista, que sería erróneo". A juicio del dirigente sindical, "lo que se debería producir es un cambio de mentalidad en los promotores inmobiliarios", en el sentido de que, actualmente, ha descendido la venta de vivienda libre, "pero hay mucha demanda de vivienda protegida y para alquiler a precios asequibles", de tal manera que los promotores inmobiliarios podrían optar por este tipo de operaciones.
Respecto al proceso de desaceleración económica que vive España, Cándido Méndez aseveró que los sindicatos "hemos hecho nuestros deberes", ya que han promocionado la adopción de medidas favorables a los trabajadores, por ejemplo vinculando la Formación Profesional (FP) al empleo y mejorando la prestación por desempleo para colectivos como el de personas mayores de 45 años. Otra medida ha sido la de mejorar el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA).
La economía española creció un 3,5 por ciento en el cuarto trimestre del año, tres décimas menos que en el trimestre precedente, y alcanzó un crecimiento del 3,8 por ciento en el conjunto de 2007, una décima menos que en 2006, según los datos de la Contabilidad Nacional Trimestral publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En términos intertrimestrales, el PIB registró un crecimiento del 0,8 por ciento, una décima más que en el trimestre anterior.
El INE indica que la menor intensidad del ritmo de crecimiento de la economía española en el cuarto trimestre de 2007 se debe a la desaceleración de la demanda nacional, que redujo seis décimas, hasta los 3,9 puntos, su contribución al crecimiento. Por su parte, el sector exterior compensó "parcialmente" este comportamiento gracias a una menor aportación negativa.