La empresa alerta de que el WLTP tendrá un impacto de más de 1.000 millones sobre su negocio
MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
El grupo Volkswgagen ha caído un 3,69% en la Bolsa de Frankfurt (hasta 146,6 euros por acción) este miércoles tras presentar un beneficio neto semestral de 6.613 millones de euros, lo que supone un aumento del 2,1% respecto a la primera mitad del ejercicio precedente.
Entre enero y junio, la cifra de negocio de la corporación germana creció un 3,5% respecto al primer semestre de 2017, hasta alcanzar 119.377 millones de euros, mientras que su resultado operativo cayó un 8,5%, hasta 8.916 millones de euros. El beneficio antes de impuestos se situó en 8.972 millones de euros, un 2% más.
Los resultados de Volkswagen se vieron afectados de forma negativa por 1.600 millones de euros derivados de "riesgos legales". Los principales motivos que causaron dicho gasto fueron la multa de 1.000 millones impuesta por la Fiscalía de Braunschweig (Alemania) en relación con el "problema" del diésel y los mayores costes en abogados.
El grupo Volkswagen vendió 5,5 millones de vehículos en lo que va de año, lo que se traduce en un incremento del 7,1% en comparación con el mismo periodo del año pasado, mientras que fabricó un 6,% más de vehículos, hasta 5,7 millones de unidades.
AJUSTES EN TODAS LAS MARCAS POR EL WLTP
El director financiero del grupo, Frank Witter, aseguró durante la conferencia de presentación de los resultados semestrales de la compañía que la entrada en vigor de la nueva norma de homologación de consumo y emisiones WLTP podría tener un impacto de 1.000 millones de euros sobre la empresa.
Witter matizó que esta cifra está en línea con lo estimado por la compañía y que Volkswagen tendrá que realizar ajustes en las gamas de modelos de todas sus marcas para poder adaptarse a la nueva normativa.
Además, apuntó que la nueva generación del Volkswagen Golf tendrá un 30% menos de versiones, mientras que Audi y marcas de volumen del consorcio como Skoda o Seat también verán reducidas en este porcentaje sus variantes.
"Estamos en camino, pero no vamos a perder volumen, sino que vamos a reducir la complejidad de la oferta", afirmó Witter, al tiempo que resaltó que la compañía dejará de fabricar modelos como el Golf descapotable, el Phaeton, el Eos o el Scirocco.
De su lado, el consejero delegado del grupo alemán, Herbert Diess, advirtió de que Volkswagen no puede "dormirse en los laureles" pese a que superó con "éxito" el primer semestre con un crecimiento "muy sólido" de sus ingresos.
"Nos esperan grandes desafíos en los próximos trimestres, especialmente con la transición hacia la nueva prueba de laboratorio WLTP", añadió Diess.
