Los habitantes del territorio de Rutshuru (RDC) califican de "insoportable" su situación

MADRID 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

Los habitantes del territorio de Rutshuru, a 70 kilómetros al norte de Goma (capital de la provincia de Kivu Norte), han calificado de "insoportable" la situación que se vive en la zona, donde reina una calma precaria y la actividades agrícolas y comerciales están bloqueadas a causa del conflicto, según informó hoy Radio Okapi, la emisora de la misión de la ONU (MONUC).

La población "vive en una miseria indescriptible a causa de la continua degradación de la situación socioeconómica" en esta zona del este de la República Democrática del Congo (RDC), indicó la emisora en su página de Internet.

En Kiwanja y en el centro de Rutshuru, dos localidades en poder de los rebeldes del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), del general disidente filorruandés Laurent Nkunda, los habitantes siguen esperando la llegada de la ayuda humanitaria para poder sobrevivir.

"La parálisis es total, o casi", según Radio Okapi. "No hay colegios ni mercado, la mayoría de los comercios y otras empresas comerciales han sido saqueados por los hombres armados y los campesinos no pueden acceder a sus tierras y viven atemorizados por su seguridad", prosiguió.

La localidad de Rutshuru, un centro comercial que enlaza Goma con el llamado Gran Norte --en especial, las ciudades de Butembo y Beni--, está inmersa en una grave crisis económica. Los precios se han triplicado. Por ejemplo, un viaje en minibús entre Goma y Kiwanja, que suele costar tres dólares por pasajero, cuesta en estos momentos diez. Frente a las casas apenas se ven algunos tenderetes con alimentos.

"Los habitantes de la región han calificado esta situación de insoportable", según Radio Okapi. "Sólo tienen un deseo: el restablecimiento de la paz para poder encargarse de sí mismos", añadió la emisora.

Por otra parte, alrededor de mil mujeres de todas las capas sociales de Goma organizaron esta mañana una ceremonia de luto por todas las víctimas de la guerra que sufre el este de la RDC, en especial por las de Kiwandja y Rusthuru.

La mayoría de ellas portaban telas delgadas de algodón (calicós) en las que se leían mensajes como "¡Estamos hartas! ¡Esto es demasiado!", "Ha llegado el momento de actuar" o "Lloramos a nuestros hijos asesinados en Kiwandja y Rutshuru". Muchas de las asistentes aseguraron que habían perdido a algún pariente en este conflicto.