Actualizado 13/10/2008 15:40

CORR.- Un juez de Llanes abre diligencias contra un hombre que enviaba revistas porno a su vecina

((ESTA NOTICIA SUSTITUYE A OTRA ANTERIOR POR ERROR EN EL TITULAR))

Un juez de Llanes (Asturias) abre diligencias contra un hombre que enviaba revistas porno a su vecina

"Como sabía que había salido con varios chavales pensé que sería una mujer muy liberal sexualmente hablando", dice el acusado


OVIEDO, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Juzgado de Instrucción de Llanes abre diligencias previas contra un hombre, J. C. L., que enviaba recortes de revistas pornográficas a su vecina en las que le citaba puntualizando un lugar, un día y una hora con la intención de "mantener un encuentro sexual esporádico" con ella, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

La mujer, que se encuentra de baja y con tratamiento por sufrir una crisis de ansiedad tras los hechos, se someterá este mes a un reconocimiento por el equipo de psicólogos del juzgado para dictaminar si la mujer sufre padecimientos por el suceso y en que grado.

La víctima declaró en el Cuartel de la Guardia Civil que lleva desde el año 2000 sufriendo acoso por parte del acusado. Esta mujer relató además que acudió a la Benemérita en varias ocasiones "sin obtener ayuda" para pedirles que la acompañaran a los lugares en los que le citaba el acusado. "Esa no es la forma que tenemos de proceder", respondían los agentes de la Guardia Civil.

Así, tras cinco años, la mujer se decidió a poner la primera denuncia de acoso en el cuartel de la Guardia Civil el 8 de julio de 2005 animada por su novio que le dijo que "no se fuese del cuartel hasta que no hubiese puesto la denuncia". A raíz de ese momento la víctima presentó 13 denuncias más "todas archivadas" según las mismas fuentes jurídicas.

La última denuncia fue el día 15 de febrero de 2008 cuando la víctima declaró que a las 13.45 horas se encontró en el buzón de su casa una revista pornográfica en la que estaba escrita a bolígrafo: "Viernes. 16 de febrero de 2008. Portal tuyo. 21 horas. Placer". La víctima había recibido muchas notas de este tipo escritas sobre recortes pornográficos en el parabrisas de su coche, pero nunca en el buzón de su domicilio.

"Al ver que la Guardia Civil se negó a acompañarla a la cita para desenmascarar al acosador", apunta la denuncia, la mujer fue acompañada de su novio, que se mantuvo escondido, una vez que llegó la furgoneta del presunto acosador al portal de la mujer. En ese instante, según la versión de la acusación, ella se acercó al cristal de la furgoneta para identificar al conductor y él la animó a subir "mientras se masturbaba". "Se bajó del coche con los genitales fuera para invitarla a montarse en la furgoneta", según la denuncia.

En ese momento, el novio de la mujer se acercó al presunto acosador y le amenazó con llamar a la Guardia Civil. El acusado le respondió: "dame una paliza pero no no me jodas la vida que tengo familia" y logró huir, según el testimonio de la víctima.

VERISÓN DEL ACUSADO

Por su parte, el acusado señaló que se encontraba en su furgoneta buscando unos papeles con unos resultados clínicos cuando apreció que una chica se acercó a la ventanilla. "Era la misma mujer que a la que solía dejarle algunas notas", declaró. "Le pregunté que era lo que quería y le dije que fuésemos a un callejón porque ahí nos podía ver alguien", confesó el procesado.

En ese momento, y según la versión del imputado, apareció un hombre al que conocía de vista y le amenazó con darle una paliza. "Le dije, sí, deberías dármela porque soy un zoquete". Y en ese instante logró huir, y no supo nada más hasta que le llamó la Guardia Civil para reclamarle las llaves de la furgoneta que había dejado abierta.

El acusado reconoció varios de los recortes de las revistas porno con su letra que tenía en su poderla víctima y manifestó que "lo que pretendía era hablar con ella para ver si accedía de voluntad a mantener una relación esporádica sexual con ella".

Manifestó que el motivo de usar páginas de revistas pornográficas en lugar de hojas en blanco se debía a que solo buscaba sexo. "Estoy obsesionado con ella y como sabía que había salido con varios chavales de Llanes pensé que sería una mujer muy liberal sexualmente hablando", apuntó el acusado en comisaría.

El juzgado de Instrucción de Llanes y la fiscalía entendieron que el acusado se enfrentaba a una falta, mientras que la acusación particular sostuvo que existe un delito. Por ello la acusación revocó la decisión de falta en la Audiencia Provincial que se pronunció a su favor e instó al juzgado de Llanes a que abra diligencias previas.