Actualizado 10/04/2008 20:15

La Abogacía rechaza las instrucciones policiales sobre polizones de barcos y exige garantías

MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Consejo General de la Abogacía Española manifestó hoy su rechazo a las instrucciones del Ministerio del Interior y Trabajo sobre tratamiento de polizones extranjeros y exigió "mecanismos eficaces que hagan posible la salvaguarda de los derechos humanos", el estudio de la solicitud de asilo del polizón y garantías para el cumplimiento del "principio de no devolución".

En un comunicado, la Abogacía advierte de que formulará una queja ante los ministerios implicados, así como a la oficina del Defensor del Pueblo para reclamar la adaptación de las instrucciones a los "mandatos legales y constitucionales".

En primer lugar, los abogados lamentan que dichas instrucciones no sean objeto de publicación en el Boletín Oficial del Estado, ni en ningún otro cuerpo legislativo. Además, censuran que se omita la presencia directa del letrado durante la primera entrevista policial con el polizón.

La Subcomisión de Extranjería de la Abogacía también rechaza que se obligue al capitán del buque mercante a comunicar, bien directamente o a través de la Consignataria, la entrada en aguas jurisdiccionales españolas con polizones a bordo.

No obstante, apunta que sólo se llevará a cabo intervención del Cuerpo Nacional de Policía y de los letrados en su caso cuando el buque atraque en un puerto español, "por lo que se produce ausencia de cualquier actuación en los supuestos en los que el buque queda fondeado en el exterior de la bocana".

"Sin embargo los polizones pueden precisar igualmente asistencia letrada, social, médica, y de intérprete para conocer cuáles son sus pretensiones con respecto a las autoridades españolas", señala en un comunicado.

Por otra parte, los abogados entienden que el guión de la entrevista que se sigue practicando a los polizones, "continúa sin mejorar la precisión y claridad de las preguntas" sobre los motivos por las que estas personas han embarcado, el tratamiento del capitán y tripulación, las atenciones dispensadas en los puertos intermedios, así como las pretensiones de entrada, permanencia, trabajo, asilo, protección internacional.

Además, censuran que no se garantice el acceso al buque, no sólo de los letrados, sino también de las ONG especializadas en la materia.