MADRID/SANTANDER 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
El portavoz y vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Enrique López, abogó hoy por establecer medidas de seguridad para los delincuentes sexuales cuando abandonan la prisión una vez cumplidas sus condenas.
Así, tras conocerse la detención del conocido como 'pederasta de Astillero' por una supuesta agresión sexual a una niña de seis años sólo tres días después de dejar la cárcel por otra condena similar, López consideró necesario que se pueda actuar sobre los delincuentes sexuales una vez hayan finalizado su condena.
En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, el portavoz del CGPJ señaló que resulta primordial "una legislación nueva" y "medidas de seguridad postdelictuales" para evitar casos como el del 'pederasta de Astillero' o el caso de Mari Luz.
En este sentido, López comparó el sistema judicial español con el alemán y afirmó que lo que hace falta en nuestro país es "salir, cruzar las fronteras y estudiar y copiar los códigos de democracia tan asentadas como son la alemana, la inglesa o la francesa".
"En alemania cuando alguien es condenado a dos o más delitos en el ámbito de la libertad sexual, se le impone lo llamado 'custodia de seguridad' que sirve para que puedan permanecer en un centro de internamiento durante 10 años más después de haber cumplido condena", hasta que cuente con "un juicio científico, técnico, jurídico, de reinserción y de curación", explicó, al tiempo que recalcó que si se hubiera realizado esto en España "hubiera sido absolutamente paradigmático".
'CASO MARI LUZ'
Por lo que respecta al caso de Mari Luz, López declaró que es "injusto" que tanto los "ministros de justicia" como la propia Fiscalía "traten de buscar un responsable único de lo que es un fracaso colectivo".
En su opinión, con el 'caso Mari Luz' se está asistiendo "a una especie de hoguera de humanidades" en donde el juez Tirado ya fue sancionado hace cuatro meses. De esta forma, el vocal del CGPJ aclaró que esta pena no fue "por lo que hizo o dejo de hacer", sino por "el resultado que se le imputó a lo que dejó de hacer".
Asimismo, calificó de "locura" al derecho sancionador administrativo, y recordó que la próxima semana se reunirá la Comisión disciplinaria que, "decidirá la sanción a imponer entre lo que pide el magistrado instructor, que es una falta grave, y lo que pide el fiscal, que es una falta muy grave".
"Al padre de Mari Luz le comprendo, es la única persona que tiene todo el derecho del mundo a decir lo que dice y, si al final no se le satisface en su pretensión, habrá que explicárselo y si no lo comprende, lo sentiré", sentenció el portavoz del CGPJ.