Actualizado 11/06/2008 16:27

La hija del 'carcelero de Amstetten' que estaba en coma se reencuentra con su familia por primera vez

VIENA, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -

Kerstin Fritzl, la mayor de los hijos-nietos nacidos de las violaciones del austriaco Josef Fritzl a su hija Elisabeth, se ha reencontrado con su familia después de casi dos meses ingresada en el hospital --uno de los cuales ha permanecido en coma-- por una grave enfermedad relacionada con el incesto.

Así lo explicó hoy en rueda de prensa el abogado de la familia, Christoph Herbst, quien destacó que Elisabeth, sus seis hijos y su madre Resemari están "ahora muy felices de estar todos juntos por primera vez".

Los médicos que atienden a Kerstin indicaron que toda la familia ha sido trasladada a una vivienda dentro de las instalaciones de la clínica que está amueblada y decorada como si fuera una casa para que el ambiente sea lo más parecido a un entorno familiar normal.

"El reencuentro de Kerstin con su familia hace unos días fue un momento emocionante y para nosotros la sorprendente recuperación de Kerstin ha sido un gran alivio", manifestó en la rueda de prensa Berthold Kepplinger, director de la clínica, que destacó que esperan que la hija mayor de Elisabeth experimente una "total recuperación".

Según explicó el médico, la joven, de 19 años, estaba en coma inducido debido a que, por la enfermedad que sufría a causa del incesto, había sufrido calambres a causa de una deficiencia respiratoria y problemas de riñón. Después de casi dos meses, abrió los ojos por primera vez el 15 de mayo y se reunió con su familia el pasado domingo.

El ingreso en el hospital de la joven, el 26 de abril, desveló el caso de Josef Fritzl, de 73 años y apodado el 'carcelero de Amstetten', quien durante 24 años mantuvo encerrada a su hija Elisabeth, con la que tuvo siete hijos, uno de los cuales murió poco después de nacer.

A los 19 años, y habiendo estado toda su vida encerrada en el sótano de la casa familiar, Kerstin fue ingresada en un hospital de Amstetten por una grave enfermedad relacionada con el incesto, lo que llevó a la investigación policial que destapó el caso.

RECUPERACIÓN

El abogado de Elisabeth y sus hijos explicó que es probable que se les asignen nuevas identidades y que incluso están considerando realojarles en otro país. Los fiscales del caso esperan poder entrevistarles a primeros de julio, pero todo dependerá de su estado de salud.

Desde que el 24 de abril Fritzl accediera a liberar después de 24 años a su hija Elizabeth, ésta, sus seis hijos y su madre viven recluidos en la clínica psiquiátrica, donde están recibiendo tratamiento psicológico constante.

"Unos van más rápido y otros van más lentos. Unos están más felices y otros más temerosos. Por ello hay que buscar un equilibrio entre todos ellos", informó Albert Reiter, uno de los médicos que les atienden.

Mientras tanto, el padre y secuestrador, encarcelado en un centro penitenciario de Sankt Pölten, capital del Estado de Baja Austria, sigue en prisión preventiva, que fue prolongada por el juez el pasado viernes.