SEVILLA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
Hace 13 años que Noelia fue madre de Álvaro, Jaime y Alejandro que son los únicos trillizos andaluces que sufren el Trastorno Generalizado del Desarrollo dentro del espectro autista y su lucha es que la Administración cree colegios especiales para este tipo de niños porque entre los 16 y los 18 años no dispone de ningún lugar donde llevarlos.
El autismo es un trastorno que afecta a uno de cada 166 niños y que convierte a las personas en seres incapaces de mantener relaciones sociales normales, viven en un mundo aislado y repetitivo del que no salen en toda su vida.
Según explicó Noelia, hasta los 16 años los niños tienen una educación específica, pero desde los 16 hasta los 18, hasta que pueden acceder a escuelas taller o trabajos de integración, existe "una especie de vacío", en la que sus hijos y otros tantos niños "se verán en sus casas".
"Aunque haya centros son insuficientes y no cubren las necesidades de estos niños y sobre todo de mis hijos en concreto --cuyos niveles dentro del espectro autista son diferenciados--", relató.
"Tenemos una inquietud muy grande porque pensamos en que se nos caiga el trabajo que hemos realizado hasta hoy si se ven obligados a acudir a una escuela con niños en peores condiciones y con mayor grado en el trastorno", afirmó.
En este sentido, explicó que en la actualidad en estos centros la mayoría de los afectados están en peor situación que Jaime y Alejandro, por lo que podría agravarse de nuevo su estado e incluso experimentar deterioros en el aprendizaje.
UN TRASTORNO BIOLÓGICO
A partir de los 12 meses de edad empiezan a hacerse notables las diferencias con el resto de niños. "Piensas que algo raro pasa pero como cuando vas a los especialistas te lo niegan porque ellos están sanos, esta enfermedad no es física y los mismos pediatras no están capacitados para detectarla", criticó.
Fue al cumplir tres años cuando los síntomas se hicieron más palpables. "Supimos que eran autistas. Lo primero que notas es el trastorno en el lenguaje y las relaciones sociales. Eran reacios a los abrazos y no mantenían la mirada", añadió.
Dentro del espectro de este trastorno biológico existen varios niveles en los que los afectados cumplen rasgos similares. Los casos de Álvaro, Jaime y Alejandro, que aún siendo gemelos sufren diferentes grados, se definen como 'autistas sabios', ya que cuentan con habilidades específicas muy desarrolladas.
Jaime se decanta por la capacidad memorística. Es capaz de recordar marcas de coches, fechas del calendario y nombres de forma literal. Álvaro lleva siempre en sus manos algo que él mismo denomina 'inventos', figuras creadas a partir de plastilina y piezas diversas. Por su parte, Alejandro, 'el artista', cuenta con una enorme capacidad para el dibujo y es capaz de realizar, desde los seis años, puzzles de más de 1.000 piezas en cuestión de horas.
Existen diversas causas no clarificadas que pueden provocar el autismo pero no un motivo real catalogado como origen de este síndrome. Hasta el momento los estudios han demostrado un origen biológico, que explica el caso de Noelia, ya que al ser gemelos comparten la mayoría de características biológicas.
Las investigaciones acerca del autismo demuestran que la mayoría de los autistas no sufren, son completamente ajenos a la mentira, a la picardía, al sarcasmo y al daño, es por ello que no son conscientes de lo que los diferencia del resto. Viven inmersos en un universo particular. "Esto es lo único que nos alienta, saber que ellos, a su manera, son felices", señaló.
Para Noelia, a la que le es imposible hablar de sus hijos sin emocionarse, "otros trastornos están más estudiados y reconocidos y pueden tratarse desde el primer día", mientras que éste es "más complicado y aún muy desconocido".
Por ello, pide que la Administración se haga cargo de la situación que viven estas familias y fomente el conocimiento del autismo, que hasta el momento ha sido un gran desconocido y para el que "aún los medios son insuficientes aunque Autismo Sevilla haga una enorme labor y haya cada vez más profesionales".