El Consejo de Europa critica a Francia por establecer cuotas de expulsión de inmigrantes irregulares

PARIS, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

El comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Thomas Hammarberg, sostiene que la política de inmigración francesa y particularmente las cuotas de inmigrantes irregulares que tienen que ser repatriados plantea "serios interrogantes en materia de derechos humanos".

En su informe sobre Francia presentado hoy, que aborda básicamente las condiciones de vida en las prisiones y los derechos de los inmigrantes, el comisario subraya que "los inmigrantes no son números e incluso los 'sin papeles' tienen derechos" y que muchos de ellos "han contribuído al desarrollo del país y merecen un tratamiento humano".

En la misma línea, considera que no tendría que haber detenciones en los alrededores de colegios y las prefecturas (delegaciones gubernamentales) y que los inmigrantes arrestados en la frontera o que están en los centros de detención tendrían que tener condiciones de vida "decentes" y disponer de "tiempo suficiente" para formular su petición de asilo.

Recomienda, además, que los procedimientos de regularización y de reagrupación familiar sean "más transparentes" y pide a las autoridades francesas dejar de marcarse objetivos cifrados de expulsión de inmigrantes, precisamente uno de los ejes del Ministerio que dirige el titular francés de Inmigración e Identidad Nacional, Brice Hortefeux.

El informe del Consejo de Europa critica igualmente con dureza la situación en las cárceles galas y llega a decir que "el pleno respeto de los Derechos Humanos no tiene que menoscabarse por cuestiones de seguridad".

Aunque cree que se han hecho mejoras desde el último informe redactado en 2006, el comisario denuncia las "condiciones inaceptables de vida" a las que se ven obligados numerosos detenidos que sufren la "sobrepoblacion, promiscuidad y vetustez de las instalaciones" y "condiciones higiénicas" poco adecuadas. A ello, añade el elevado número de suicidios en las cárceles francesas, algo que considera un "síntoma de deficiencias estructurales en el sistema penitenciario".

DERECHOS DE LOS DETENIDOS

Por ello, el comisario apela a las autoridades galas a resolver rápidamente estos problemas recordando que los actuales proyectos de reformas administrativas "no pueden ignorar los derechos fundamentales de los detenidos". Además, se tienen que encontrar soluciones adaptadas y medios financieros para mejorar las condiciones materiales y el tratamiento a las personas con problemas mentales.

El comisario Hammarberg muestra igualmente su preocupación por el riesgo de "arbitrariedad" que conlleva la ley de retención por razones de seguridad aprobada esta legislatura y pide por ello "una gran vigilancia". "La peligrosidad, que es el criterio determinante para ordenar una retención por motivos de seguridad no es un concepto jurídico o científico claro", señala el informe.

Así, el responsable de Derechos Humanos del Consejo de Europa argumenta que, si bien en algunas circunstancias se deben adoptar medidas severas para proteger a la sociedad, éstas deben ser el último recurso y antes tienen que tomarse medidas de carácter preventivo para evitar la reincidencia.

La adopción en Francia de esta ley elaborada por la ministra de Justicia, Rachida Dati, generó una fuerte polémica y llevó al principal partido de la oposición a recurrirla ante el Consejo Constitucional francés que corrigió en parte el proyecto de la ministra limitando los casos en los que su aplicación será inmediata. El objetivo de la normativa es combatir la reincidencia permitiendo la retención de un preso peligroso una vez purgada su pena.

Con más de 3.000 menores detenidos anualmente en Francia, Hammarberg muestra también inquietud por las duras sanciones que adoptan las jurisdicciones respecto a los menores. Y, si bien no pone en duda la gravedad de ciertos actos cometidos por menores, sostiene que "el problema de la delincuencia juvenil no se resolverá con un endurecimiento de las penas".

Sugiere que una política exitosa necesita medidas que permitan "la prevención, la rehabilitación y la integración social de los jóvenes con dificultades" y que, en todos los casos, debe primar "lo educativo antes que lo represivo".

GITANOS

El informe aborda igualmente la situación de los transeúntes y de los gitanos, para los que también se pide soluciones que garanticen el respeto a su dignidad, mejor acceso a la salud, a la educación y al empleo.

Finalmente, el comisario invita a las autoridades francesas a consultar de manera más sistemática a la sociedad civil y a las estructuras nacionales de derechos humanos así como a proteger su independencia.

"Su papel --dice-- es fundamental para garantizar un seguimiento regular de la situación de los derechos humanos. Reforzar el diálogo con ellas beneficiaría la protección de los derechos humanos en Francia".

El documento presentado hoy se basa en las constaciones realizadas por el comisario durante la visita que hizo a Francia a finales del pasado mes de mayo en el marco de las actividades de evaluación de los compromisos en materia de Derechos Humanos de todos los Estados miembros del Consejo de Europa.