ACNUR alerta de la necesidad de trasladar a 65.000 desplazados ubicados en la primera línea de combate

Europa Press Sociedad
Actualizado: jueves, 13 noviembre 2008 20:32

GOMA (RDC), 13 (Reuters/EP)

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en la región de Kivu Norte de República Democrática del Congo (RDC) alertó este jueves de que decenas de miles de refugiados que se encuentran en un campamento ubicado en la primera línea de los enfrentamientos entre los rebeldes y las tropas gubernamentales tienen que ser desplazados urgentemente a un lugar más seguro.

Más de 65.000 civiles huidos de los enfrentamientos están acampados en Kibati, localidad situada a unos pocos kilómetros al sur de la zona de combate entre los rebeldes del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), del general renegado Laurent Nkunda, y las tropas del Gobierno.

Estos refugiados, que están viviendo hacinados en condiciones de suciedad y junto a un volcán activo, se encuentran entre los 250.000 civiles que se han visto forzados a huir de sus hogares desde que el pasado agosto resurgieran los enfrentamientos en la provincia de Kivu Norte, en el este de RDC.

Los últimos combates con artillería y ametralladoras en la primera línea, cercana a Kibati, han interrumpido varias veces la distribución de ayuda a los refugiados y empujado a miles de ellos carretera abajo hacia el sur en dirección la capital provincial, Goma, a 10 kilómetros de distancia.

"Hemos notado que este área se ha convertido en la primera línea (...). Los (refugiados) que están en Kibati no pueden permanecer en ese lugar", dijo el responsable de ACNUR en Kivu Norte, Ibrahima Coly.

"Nos hemos dado cuenta de que esta gente podría estar en serio peligro y la comunidad humanitaria decidió que deberíamos moverles de allí (...) lo antes posible", dijo Coly a Reuters. Las agencias de ayuda tienen previsto trasladar a los civiles que lo deseen a un campamento en Mugunga, a 10 kilómetros al oeste de Goma, indicó.

Naciones Unidas tiene desplegada en RDC su misión de paz más numerosa del mundo (MONUC), con 17.000 hombres, pero sus tropas han sido incapaces de proteger a cientos de miles de civiles desarraigados de Kivu Norte de ser asesinados y sufrir saqueos y violaciones. Las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos han acusado a ambos grupos de haber cometido abusos.

"Lo que he escuchado (de las tropas de paz) es que (...) no tienen la capacidad de proteger a la gente" en Kibati, dijo a Reuters uno de los trabajadores humanitarios.

Nkunda, que quiere que el presidente Joseph Kabila acepte dialogar sobre el futuro de RDC, lanzó una ofensiva hace dos semanas con sus guerrillas a las puertas de Goma, atrayendo la atención de la comunidad internacional hacia el conflicto de Kivu Norte. El líder rebelde suspendió la ofensiva declarando un alto el fuego.

POSIBLES INFILTRADOS

Los trabajadores humanitarios dicen que los enfrentamientos han creado una situación "catastrófica" de seguridad y humanitaria, con el riesgo de que se repita la tragedia de la guerra librada entre 1998 y 2003 que mató a varios millones de personas.

El trabajador humanitario consultado por Reuters, que pidió no ser identificado, indicó que también existe el riesgo de que los combatientes de Nkunda se mezclen con los civiles desplazados.

"Si hay enfrentamientos, los desplazados serán trasladados desde el campamento a Goma. Esto puede facilitar la infiltración de personas armadas entre los desplazados que corren hacia Goma", añadió.

Las agencias humanitarias están pidiendo refuerzos urgentes para las tropas de Naciones Unidas en el este de RDC. El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha solicitado al Consejo de Seguridad que apruebe el envío de 3.000 efectivos adicionales.

"Nuestra mayor preocupación es la seguridad", dijo a Reuters el responsable del departamento de África de ACNUR, Marjon Kamara, desde Senegal. Sin embargo, aunque esto se apruebe, las tropas podrían tardar dos meses en desplegarse. Las naciones africanas también han ofrecido fuerzas de paz, pero bajo un mandato regional o de la ONU.

En Kiwanja, cerca de Rutshuru, a 70 kilómetros al norte de Goma, en la zona controlada por los rebeldes, grupos defensores de los Derechos Humanos acusaron a los rebeldes de Nkunda y a las milicias rivales progubernamentales de asesinar a decenas de civiles, la mayoría adultos. Esto ocurrió a pesar de que las tropas de la ONU estaban cerca.

Los comandantes de la MONUC en RDC dicen que su fuerza, a pesar de su tamaño, no es suficiente para cubrir un país del mismo tamaño que Europa, con pocas carreteras y donde los rebeldes y las milicias atacan a los civiles en varios frentes.

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