Actualizado 21/04/2008 18:14

China defiende que su concepción de los "Derechos Humanos" es distinta a la de Occidente

Reuters


BEIJING, 21 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -

Tras las acusaciones de Occidente a China sobre la falta de respeto en el país asiático a los Derechos Humanos, especialmente en el último mes tras las revueltas en Tíbet, expertos afines al Gobierno han salido a defender la relatividad del concepto sobre qué es un derecho humano y qué no. La idea china sobre los derechos fundamentales señala, además, que no se pueden exigir derechos sin cumplir a cambio con obligaciones.

"China se opone a la separación de derechos y obligaciones. China cree que los Derechos Humanos, al igual que otros tipos de derechos, no son 'absolutos' y que los derechos que se disfrutan deben ajustarse a las obligaciones cumplidas", manifestó Luo Haocai, de la Sociedad China para el Estudio de los Derechos Humanos, durante el foro sobre esta cuestión que se está celebrando estos días en la capital china.

El relativismo moral en lo que a Derechos Humanos se refiere ha sido apoyado en diversas ocasiones por intelectuales afines al régimen chino.

Su teoría señala que la Historia china no coincide con la de Occidente y que, de la misma manera que China está viviendo actualmente una etapa de "comunismo con características chinas" (es decir, de capitalismo sin apertura política), también existe una visión particular de Derechos Humanos con características chinas, en la que los derechos individuales se subyugan a los colectivos, que llegan dictados por el Partido Comunista Chino.

"Los Derechos Humanos no sólo son individuales, sino también colectivos. El país también valora los derechos colectivos, que son una razón importante de la estabilidad china, la armonía social y la libertad del pueblo", declaró Luo.

Diversos activistas políticos que manifestaron en público su oposición a las políticas de Beijing (teóricamente, la libertad de expresión está legalmente amparada) han sido encarcelados bajo el cargo de subversión o de incitar a la subversión contra el Estado.

La cúpula china argumenta además que el concepto de Derechos Humanos es más amplio de lo que puedan creer las ONG occidentales. En su informe anual sobre el avance de los Derechos Humanos en el país, el Gobierno suele hacer mención a las campañas de reducción de la pobreza o de alfabetización, y no incluye referencias a la libertad de expresión.

"Un país en desarrollo como China debe dar prioridad a los derechos de subsistencia y desarrollo de sus ciudadanos. China garantizará otros derechos humanos económicos y sociales a condición de que antes se hagan realidad estos dos derechos básicos", declaró Li Junru, subdirector de la Sociedad China para el Estudio de los Derechos Humanos.

Según Li, "sólo después de una larga lucha contra el imperialismo y el feudalismo pudo China crear la base para aplicar los Derechos Humanos básicos". El momento de inflexión lo marcó, a su juicio, la llegada al poder del Partido Comunista Chino, en 1949.

No obstante, incluso la postura oficial señala en ocasiones que en China el desarrollo de los Derechos Humanos "es un proceso gradual", lo que vendría a cuestionar la idea del relativismo moral.

"China es un país en vías de desarrollo con una población de 1.300 millones de habitantes, y el desarrollo de los Derechos Humanos todavía debe hacer frente a muchos problemas y dificultades", declaró el director de la Oficina de Información del Consejo de Estado (gabinete), Wang Chen, según recoge la agencia oficial Xinhua.

"Respetar y proteger los Derechos Humanos y promover su completo respeto es una tarea ardua y a largo plazo para el Gobierno y el pueblo chino", declaró Wang.