MIAMI, 2 Jul. (Reuters/EP) -
Un hombre fue ejecutado ayer mediante una inyección letal en Florida, por el secuestro, abuso sexual y asesinato de un niño de 11 años, en la primera ejecución en dicho estado desde que un fallo de la Corte Suprema terminó con una moratoria de facto al castigo capital.
Funcionarios de la Prisión Estatal de Florida pronunciaron la muerte de Mark Dean Schwab, de 39 años, a las 18:15 (00:15 hora peninsular) tras inyectarle un cóctel mortal de drogas que paralizaron sus pulmones y detuvieron su corazón, según dijo la portavoz del gobernador, Charlie Crist.
Schwab es la décima persona ejecutada en Estados Unidos desde que el pasado mes de abril la Corte Suprema rechazó un cuestionamiento legal al cóctel de tres drogas utilizado en la mayoría de las ejecuciones durante los últimos 30 años.
También fue el primer prisionero condenado a muerte en Florida desde la ejecución de Angel Diaz en diciembre de 2006, que tardó 34 minutos en morir, un período inusualmente largo, ya que los tubos intravenosos utilizados para administrar las drogas mortales estaban mal conectados.
El caso Diaz reinició el debate nacional sobre cómo aplicar la pena de muerte en el país. Sus opositores han argumentado durante mucho tiempo que la inyección letal, la cual es usada en 37 estados, es un castigo cruel e inusual prohibido por la Constitución de Estados Unidos.
Schwab fue ejecutado exactamente 16 años después de que recibió su sentencia de muerte por la violación y el asesinato de Junny Rios-Martinez Jr. en el Condado estadounidense de Brevard.
