Actualizado 22/08/2008 19:25

Greenpeace denuncia que "destacadas empresas alimentarias" continúan en la lista roja por usar ingredientes transgénicos

MADRID, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -

La organización ecologista Greenpeace ha denunciado que "numerosas y destacadas" empresas alimentarias permanecen en su 'lista roja' por utilizar ingredientes transgénicos o por negarse a garantizar que sus productos no contienen algún componente con tal origen. Además, celebró que otras marcas hayan pasado a la calificación "verde" de la 'Guía Roja y Verde de Alimentos Transgénicos', que publica la ONG.

En ese listado, que Greenpeace actualiza periódicamente, se registra la política en materia de transgénicos de los principales fabricantes alimentarios, los resultados de los análisis de laboratorio y el seguimiento del etiquetado de los productos, según explicó la ONG en comunicado.

Así, en la lista roja figuran empresas como Bimbo, Aceites Coosur, Nestlé (Maggi, Buitoni, Solís, La Cocinera, Nescafé, Kit Kat, etcétera), Unilever (Frigo, Flora, Lipton, Knorr, Maicena, Ligeresa, etcétera), Borges o el Grupo SOS (Carbonell, Koipe, Louit, etcétera), que "siguen sin querer dar esta información y prefieren negar a los consumidores el derecho a elegir su alimentación".

Sobre estas corporaciones el responsable de la campaña de transgénicos de Greenpeace, Juan Felipe Carrasco, calificó de "vergonzoso que, a pesar del rechazo de los consumidores por los alimentos procedentes de cultivos que suponen un grave riesgo para el medio ambiente, la salud y la economía, algunas empresas sigan sin querer garantizar que no utilizan este tipo de ingredientes".

En el lado contrario, Galletas Arluy, Nutrexpa (Cola Cao, Phoskitos, Okey, Paladin, Nocilla, etc), Siro (galletas Siro, Rio o Reglero), Gallina Blanca (Avecrem, Sopinstant, El Pavo, etc), Gullón (Gullón, Diet Nature), Santiveri o Pascual y distribuidores como Alcampo o Carrefour pasaron a la lista verde al entregar la documentación necesaria que garantiza la no utilización de ingredientes transgénicos.

Por otra parte, Greenpeace denuncia también que el Gobierno permite el cultivo de 75.000 hectáreas de maíz transgénico que entran en la cadena alimentaria "sin control ni transparencia" y además admite "cultivos transgénicos prohibidos" en la mayoría de los estados productores de maíz de la Unión Europea por razones sanitarias o ambientales. De esta manera señala que el Ejecutivo español favorece a las cuatro empresas agro biotecnológicas que "pretenden inundar la cadena alimentaria de alimentos 'Frankestein'".