Actualizado 16/12/2008 16:19

Marte podría encontrarse en un ciclo climático seco, según las muestras facilitadas por 'Phoenix'

MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las muestras de suelo ártico marciano que la nave 'Phoenix' cavó a lo largo de su misión en Marte son "muy frías y muy secas", y por ello, los científicos que las analizan creen que la nave trabajó en el planeta rojo durante un ciclo climático seco, según informó hoy el laboratorio de propulsión de la NASA.

Durante los periodos más cálidos o secos, la tierra se humedece, y modifica su química, generando efectos que persisten incluso en las épocas frías. Las exploraciones de 'Phoenix' aumentaron la confianza de los científicos en la predicción de modelos sobre el vapor de agua que se mueve entre el suelo y la atmósfera, y el hielo subterráneo.

En este sentido, los expertos predijeron que el vapor de agua que fluye por el planeta puede humedecer la tierra marciana, en periodos en los que se inclina el eje de Marte y se alcanza la oblicuidad (ángulo que forma la eclíptica con el Ecuador, y que en la actualidad es de 23 grados y 27 minutos), es más grande que en temporadas más secas.

"Hace millones de años y bajo un clima más cálido, el hielo habría sido más profundo pero en la superficie podría haberse derretido y humedecer la tierra", afirmó el principal investigador de la misión Phoenix, Peter Smith de la Universidad de Arizona.

Como Marte no dispone de una luna tan grande como la Tierra, presenta ciclos periódicos cuando su inclinación es mayor que la terrestre. Durante estos periodos de altas inclinaciones, el Sol apunta directamente sobre los polos marcianos, y las tomas de Phoenix sobre la superficie ártica se realizaron durante los "calurosos" veranos marcianos.

Además, los científicos descartan la posibilidad de que el hielo encontrado por debajo de la superficie marciana no se corresponda con restos de un océano que existió en un tiempo pasado, ya que consideran que este fenómeno tiene lugar en el planeta para encontrar el equilibrio con el medio ambiente.

"En función de los ciclos de oblicuidad que presenta Marte, el medio ambiente se modifica para encontrar el equilibrio. Por lo menos, estos periodos de tiempo han tenido lugar una docena de veces en los pasados 10 millones de años, cuando finas capas de agua estaban activas en la superficie marciana", explica el experto.

Igualmente, la pista clave que ha facilitado el descubrimiento de este hecho es la textura que presentaban las muestras de polvo y arena transportadas. "Los trozos están muy cohesionados, como si fuera cemento. Entonces, creemos que su cementación es debida a las moléculas de agua que se adhieren a las superficies terrestres, o procedente de redeposiciones de sal que Phoenix identificó en la tierra marciana, como magnesio perclorato o carbonato cálcico", concluye.