Actualizado 14/05/2008 21:59

Más de 30.000 personas están desaparecidas en la ciudad de Shifang, donde se han confirmado 2.500 muertos

CHENGDU, 14 May. (EUROPA PRESS) -

Más de 30.000 personas están desaparecidas o fuera del alcance de los equipos de rescate en la ciudad china de Shifang --afectada por el terremoto del lunes pasado--, donde se han confirmado más de 2.500 fallecidos, según informó hoy el gobierno local.

Unos 238 estudiantes han quedado sepultados bajo los escombros de los edificios derrumbados y 147 están desaparecidos, según los últimos datos de las autoridades locales. Los heridos ascienden a 100.000, y las pérdidas materiales están valoradas en unos 40.000 millones de yuanes (casi 3.700 millones de euros).

Según la agencia de noticias estatal china, Xinhua, algunas de las personas desaparecidas son mineros de localidades pequeñas. Mientras, unos 1.000 militares han llegado a la zona en paracaídas para realizar labores de rescate. En los refugios gubernamentales ya hay unas 10.000 personas.

El seísmo destruyó dos plantas químicas de la localidad de Yinghua (en Shifang), provocando la fuga de 80 toneladas de amonio y obligando a 6.000 personas a abandonar la zona. No obstante, el escape ha sido solucionado y no hay que lamentar muertos, según Xinhua.

El terremoto, de 7,8 grados en la escala de Richter, tenía su epicentro en el condado de Wenchuán (provincia de Sichuán) pero afectó a muchas otras partes de China. El balance total de muertos asciende a casi 15.000 pero sigue aumentando.

EL PRIMER MINISTRO SE DESPLAZA A BEICHUÁN

El primer ministro chino, Wen Jiabao, se desplazó hoy al condado de Beichuán, una de las áreas más perjudicadas por el terremoto, donde supervisó las labores de rescate. Wen reiteró la importancia de salvar la vida de los supervivientes, a quienes animó a confiar en la futura reconstrucción de sus casas.

En la Escuela de Enseñanza Media de Beichuán, donde hay más de 1.000 personas bajo los escombros, los equipos de rescate continuaron dirigiéndose a los posibles supervivientes mediante un megáfono para pedirles que mantuviesen la calma. "Es muy importante que sepan que los trabajadores de rescate están intentando salvarles", dijo Wen, emplazando a "no perder la esperanza" mientras haya "una pequeña posibilidad" de que las personas sepultadas sobrevivan.

La cifra de muertos en Beichuán se sitúa entre los 3.000 y los 5.000, y el número de heridos ronda los 10.000. Hasta la mañana de hoy se había logrado salvar a más de 300 supervivientes.

El primer ministro también quiso mirar al futuro y aseguró que, con un "esfuerzo conjunto", se pueden construir nuevas viviendas. "Cuando nos enfrentamos a una calamidad, lo más importante es tener la determinación para combatir el desastre y confiar en un futuro mejor", agregó. Por último, agradeció, en nombre del Gobierno chino, la ayuda prestada por Estados Unidos y por sus compatriotas de Hong Kong.