GINEBRA 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
La organización médico-humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) alertó mediante un comunicado de que los somalíes se enfrentan actualmente a una crisis humanitaria grave con necesidades críticas sin cubrir, ya que sólo en el mes de mayo los equipos de la organización, que trabajan en los suburbios de Mogadiscio, Hawa Abdi y Afgoye han tratado a más de 2.500 niños con desnutrición aguda.
Los índices de desnutrición sobrepasaron los umbrales de emergencia durante el último año y el número de casos nuevos se incrementa mientras que la asistencia externa disminuye en calidad y en cantidad debido a la alta inseguridad y el aumento de los ataques contra los trabajadores humanitarios, añadió MSF.
"Somalia ya no está al borde de una catástrofe, el desastre está pasando ahora", afirmó el director de operaciones de MSF en Ginebra, Bruno Jochum. "Sólo la semana pasada, más de 500 niños gravemente desnutridos fueron internados en nuestros programas de nutrición. Si esta tendencia continúa, la desnutrición puede afectar pronto a los niños mayores de cinco años y a los adultos vulnerables. No podemos proporcionar la ayuda necesaria para evitar un deterioro de la situación", aseguró Jochum.
La violencia continúa en Mogadiscio y sus alrededores, cobrándose la vida de muchos civiles. En la sala de operaciones en Daynile, en las afueras de Mogadiscio, hemos atendido a más de 2.100 pacientes con heridas sólo durante este año y más de la mitad son mujeres y niños menores de 14 años.
Este clima de inseguridad impide que haya una evolución en la calidad de la asistencia. Los trabajadores humanitarios son, con regularidad, objeto de secuestros o asesinados y ninguna organización, incluyendo MSF, puede trabajar con continuidad con su personal internacional.
"Veinticuatro meses después de la implicación de la comunidad internacional para intentar restablecer la estabilidad y luchar contra el terrorismo, la situación es catastrófica para la población somalí", explicó el presidente internacional de MSF, Christophe Fournier. "El conflicto se ha intensificado con violencia contra los civiles, lo que contribuye al actual desastre humanitario. MSF pide que se asegure la independencia de la acción humanitaria y que todos los beligerantes garanticen acceso seguro a los actores humanitarios", añadió.
MSF es el principal proveedor de asistencia médica en el centro y el sur del país y, en la actualidad, la inseguridad impide a la organización enviar al terreno personal internacional de forma permanente. Pese a la dedicación del personal somalí, que lleva los programas y proporciona ayuda médica de urgencia en al menos diez regiones, esta ayuda es insuficiente en comparación con lo que se necesita hoy en día en Somalia, concluyó el comunicado de la organización humanitaria.