BEIJING, 27 Mar. (Reuters/EP) -
La organización Human Rights Watch denunció este jueves que el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas debería afrontar la actual crisis en Tíbet, al tiempo que Beijing continúa su ataque a los tibetanos desde hace más de dos semanas para poner fin a las manifestaciones que comenzaron en Lhasa.
Asimismo, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, instó ayer a su homólogo chino, Hu Jintao, a que establezca conversaciones con el líder espiritual Dalai Lama.
Hu afirmó que los monjes deben dejar de apoyar la independencia de Tíbet y Taiwán y poner fin a la violencia y a las actividades ilegales.
A su vez, la ONG afirmó que Australia, Unión Europea, Suiza y Estados Unidos apelaron durante la sesión en el Consejo de la ONU, al cumplimiento de los derechos humanos ante "el abuso de las autoridades chinas en Tíbet", aunque Beijing bloqueó el debate, respaldada por Algeria, Cuba, Pakistán, Sri Lanka y Zimbabwe.