Actualizado 20/06/2008 21:39

La UE destinará el 0,56% de su PIB al desarrollo en 2010 y el 0,7% en 2015

Subrayan su determinación de dar una respuesta colectiva global al cambio climático y los altos precios de los alimentos


BRUSELAS, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea han reafirmado en Bruselas su "firme compromiso" de destinar el 0,56 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB) a ayuda al desarrollo en 2010 y el 0,7 por ciento en 2015, tal y como acordaron en mayo de 2005 y a pesar de que en 2007 la ayuda de los Estados miembros al desarrollo, por primera vez, descendió globalmente, pasando del 0,41 por ciento del PIB en 2006 al 0,38 por ciento el año pasado.

Por su parte, los compromisos de la UE con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) deben traducirse en un incremento de más de 66.000 millones de euros de ayuda al desarrollo por parte de la Unión Europea en 2010 para lograr cumplir el objetivo de la ONU de reducir a la mitad la pobreza en el mundo. Al menos la mitad de este incremento colectivo deberá destinarse a África, según consta en la declaración de conclusiones adoptada este viernes por Veintisiete en el Consejo Europeo.

"La Unión Europea continuará desempañando un rol de liderazgo como mayor donante del mundo y hará todos los esfuerzos necesarios para garantizar respuestas ambiciosas orientadas a la acción", reza el texto de conclusiones adoptado por los jefes de Estado y de Gobierno de la UE en el que se anima a elaborar planes nacionales y un "calendario indicativo" de cómo piensan ir cumpliendo los ODM.

Además, la Unión Europea trabajará para lograr el objetivo colectivo de destinar 2.000 millones de euros anuales en 2010 --a partes iguales entre los Estados miembros y la Comisión Europea-- para apoyar el comercio en los países en vías de desarrollo. La mitad de esta ayuda estará destinada a los países de las regiones de África, Caribe y Pacífico.

SERIA PREOCUPACIÓN POR ÁFRICA

A pesar de manifestar su "seria preocupación" por la situación del continente africano, los jefes de Estado y de Gobierno de la UE subrayaron su convicción de que el cumplimiento de los ODM todavía es posible "en todas las regiones del mundo si se impulsa una acción concertada inmediatamente y de forma sostenible hasta 2015".

Los Veintisiete también se comprometen a mejorar la eficacia de su ayuda al desarrollo a partir de "reformas radicales" y proponen a los países en desarrollo trabajar conjuntamente para reducir la pobreza y el hambre. También proponen un trabajo conjunto en áreas como la educación, salud, medio ambiente, agua, infraestructura, agricultura y para extender la igualdad de género.

Asimismo, los Veintisiete subrayan que "la Unión Europea permanece determinada a proporcionar una respuesta colectiva global a los nuevos desafíos al desarrollo" en países en vías de desarrollo que representan fenómenos como el cambio climático y los elevados precios de los alimentos.

En este sentido, los Veintisiete ayudarán a los países más pobres y vulnerables al calentamiento global a adaptar su crecimiento económico para hacerle frente y la UE "explorará vías para movilizar nuevos recursos financieros para combatir el cambio climático y su impacto negativo" en base a la propuesta de la Comisión Europea de crear un mecanismo financiero global para ello.