Actualizado 11/07/2008 18:11

De la Vega descarta que los países de tránsito se hayan "relajado" en el control de la inmigración ilegal

España cuidará "como merecen" a los irregulares que lleguen, pero aplicará la ley "siempre"


MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta Primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, descartó este viernes que los países de tránsito de la inmigración irregular como Marruecos o Mauritania, se hayan "relajado" en el control de las embarcaciones que parten clandestinamente rumbo a España.

En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, De la Vega aseguró que "no hay ninguna información que ponga de manifiesto que hay niguna relajación en el control de la inmigración irregular" e incidió en que "si cabe, lo que hay es cada vez mayores medios y más medidas para luchar" contra el flujo de inmigrantes clandestinos.

En este sentido, recordó los recientes viajes a distintos países africanos emprendidos por los ministros de Asuntos Exteriores e Interior para afirmar que el Gobierno "está trabajando" en las relaciones bilaterales para luchar contra la inmigración irregular, lo que a su juicio "requiere un trabajo constante e intenso porque la sitación es muy difícil" en los países de origen.

"TRAGEDIA" EN LAS COSTAS ANDALUZAS

La vicepresidenta se refirió asimismo, a la muerte esta semana de 29 inmigrantes, entre ellos varios bebés, que intentaban llegar en pateras a las costas españolas y al estado de los supervivientes para manifestar su "enorme de tristeza" por lo sucedido. Según afirmó, "lo prioritario es facilitar la recuperación de cualquier ser humano que se encuentra en esa terrible situación" y eso es lo que ahora está haciendo el Gobierno.

Sobre la posibilidad de que se conceda permiso de residencia o asilo a alguna de estas personas, De la Vega añadió que "la ley se tiene que aplicar siempre teniendo en cuenta la situación de las personas desde el punto de vista del Derecho Humanitario" y señaló que, si bien la legislación española contempla excepciones, "no se prevén situaciones de asilo por naufragio".

Asimismo, la vicepresidenta señaló que esta "tragedia", "reafirma" al Gobierno en la política de inmigración que ha venido desarrollando y que se apoya en la cooperación, "un tema central" para ayudar a los países africanos en su desarrollo; la colaboración con los países de origen; el control en las fronteras para tener una inmigración "legal y ordenada" y, "por supuesto", la implicación de la Unión Europea.

Según apuntó, mientras el Gobierno "defiende y alcanza" estos objetivos, cuidará "como merecen a quienes llegan" a las costas españolas con "respeto a sus derechos". No obstante, envió un mensaje a quienes estén pensando en emigrar de forma clandestina: "De verdad, no merece la pena arriesgar su vida y la de sus hijos en un viaje tan duro y sin rumbo final".