Dirigentes etíopes acusa a Amnistía Internacional de difundir "mentiras" y "propaganda" contra su Ejército

ADDIS ABEBA 24 Abr. (Reuters/EP) -

Dirigentes etíopes acusaron hoy a la ONG Amnistía Internacional de difundir "mentiras" y "propaganda", después de que la organización culpase al Ejército etíope de haber asesinado a 21 personas, incluidos un imán y varios escolares islámicos, en una mezquita de Mogadiscio.

El portavoz del Ministerio de Información, Zemedkun Tekle, condenó el informe y dijo que "las alegaciones de Amnistía son mentiras sin comprobar y propaganda que han recibido de los grupos islamistas somalíes, Etiopía nunca ha estado involucrada en dichos incidentes". Asimismo, Tekle se mostró irónico al afirmar que los etíopes se hubiesen "sorprendido si Amnistía hubiera dicho algo positivo sobre su país y no las frecuentes mentiras que emplean".

Por su parte, Bereket Simon, consejero del presidente Meles Zenawi, también criticó la acusación hecha ayer por la ONG y recordó que Amnistía no tiene delegación en Etiopía. "Cada vez aumentan más los rumores y las acusaciones sobre nuestro país que están basadas en informaciones falsas".

La ONG, que defiende los Derechos Humanos en el mundo, aseguró que los soldados también habían capturado a decenas de niños durante el ataque a la mezquita de Al Hidaaya, en el norte de la capital de Somalia a principios de esta semana como parte de sus operaciones contra los insurgentes.

Etiopía tiene miles de soldados en Somalia para apoyar al Gobierno, que cuenta con el sustento de varias potencias occidentales, en su lucha contra los rebeldes islamistas.

ESCALADA DE VIOLENCIA EN MOGADISCIO

Algunos líderes islamistas moderados somalíes han decidido posponer sus planes de recibir a las fuerzas de paz de Naciones Unidas después de que Amnistía Internacional hiciese público ayer el informe, que coincidió con una escalada de violencia en Mogadiscio.

Cuatro cadáveres fueron encontrados ayer en la capital de Somalia, según varios testigos locales, elevando la cifra de muertos desde el pasado fin de semana a 103, a causa de los bombardeos y la toma del poder en muchas aldeas del país por parte de los milicianos islamistas.

Los insurgengtes islamistas ven la presencia de las tropas etíopes como una ocupación. Según las organicaciones humanitarias locales han muerto 6.500 personas durante el último año y más de un millón de los nueve que vivían en el país han tenido que abandonar sus casas.