VALLADOLID 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La misionera María Presentación López Vivar, perteneciente al Instituto de Religiosas San José de Gerona y herida grave ayer en la República Democrática de Congo como consecuencia del enfrentamiento armado que se vive en la zona, fue evacuada hoy hasta la ciudad sudafricana de Pretoria.
La madre María, Superiora General de la Congregación, explicó, en declaraciones a Europa Press, que la hermana herida fue intervenida de urgencia en el Hospital de Rutshuru gestionado por Médicos Sin Fronteras--le fueron amputadas ambas piernas--y posteriormente trasladada al Hospital Militar de Goma, desde donde hoy mismo, y tras un intento ayer fallido, fue finalmente evacuada hasta Pretoria.
"Sabemos que ha aterrizado y la están llevando al Hospital Militar para que los médicos examinen sus heridas", añadió la Superiora General, quien aseguró desconocer cuándo la hermana burgalesa podrá ser repatriada a España puesto que, como precisó, "ello dependerá del parte médico porque se encuentra bastante mal".
Además del dolor con el que la congregación a vivido la triste noticia del atentado, la madre María declaró que ese sentimiento se extiende igualmente al hecho de que "quedan allí otras hermanas, hermanas africanas, cuyas familias se han visto obligadas a desplazarse ante el grave peligro existente".
De hecho, permanecen aún en la zona tres hermanas africanas, aunque expresó su deseo de que todas ellas puedan huir a través del corredor humanitario que está siendo abierto hacia Goma o Ruanda. "No querían salir, no quieren dejar a la gente así pero al final les hemos dicho que salgan por su seguridad", concluyó la madre María.
La burgalesa herida se encontraba en Rubare, cerca de Rutshuru, ciudad de la República Democrática del Congo (RDC) que tomaron ayer los rebeldes tutsis liderados por el general renegado Laurent Nkunda, según Obras Misionales Pontificias (OMP).
La religiosa vivía allí, trabajaba en un hospital cercano y fue precisamente en su casa donde resultó herida después de que la vivienda se viera afectada por metralla o la explosión de una bomba.
La misionera herida, nacida en Tobar (Burgos) hace 64 años y que ya trabajó en misiones varios años en Ruanda, se encontraba acompañada por otra religiosa burgalesa, Clementina Urbana Sancho Herrera, nacida en Castrillo de Murcia (Burgos), que salió ilesa del percance.