Actualizado 29/10/2008 14:54

Greenpeace alerta de que la mayoría de las empresas de cloro de España utiliza celdas de mercurio

BARCELONA, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -

Greenpeace alertó hoy que ocho de las nueve plantas de cloro-álcali que existen en España siguen utilizando la tecnología de celdas de mercurio, técninca "muy contaminante". Además, según este estudio, se encontraron otros contaminantes.

La organización presentó en rueda de prensa un informe titulado 'La industria del cloro: contaminación silenciosa' que se realizó recogiendo muestras en junio y julio de 2007 de aguas residuales, agua de río, sedimentos y muestras de agua y lodos en balsas utilizadas para tratar efluentes.

Según el director de Greenpeace, Juan López de Uralde, el mercurio tiene una alta toxicidad y una gran persistencia en el medio ambiente. La responsable de la campaña de Contaminación de la organización, Sara Del Río, afirmó que el mercurio, el cadmio y los oraganoclorados son muy perjudiciales para la salud e incluso pueden tener efectos cancerigenos.

Según el estudio, de todas las plantas estudiadas, tres continúan vertiendo directamente al río (Monzón, Sabiñánigo y Flix) y son las que presentan mayores niveles de contaminación. El resto lo hacen a través de emisarios submarinos.

El caso que consideraron más grave fue el de Flix (Tarragona), que es la planta con más años de historia en España. En Flix es donde se registraron los niveles de mercurio más altos del estudio.

Del Río denunció la permisibilidad de las autoridades públicas. "El Gobierno tendría que haber exigido un cambio de tecnología", afirmó. Además, mostró su desaprobación por el acuerdo que ha firmado el Gobierno con la industria del cloro, que le permite seguir utilizando celdas de mercurio hasta 2020.

De momento, la única de las empresas que ha cambiado las celdas de mercurio por las de membrana ha sido la planta de Hernani (Guipúzcoa).

El cloro se utiliza sobre todo para la fabricación de PVC, que según Sara del Río es prescindible. La mayor parte de plantas de cloro-álcali se encuentra en Catalunya y Aragón (un total de 5), aunque también hay en Galicia, el País Vasco, Cantabria y Andalucía.