NUEVA YORK, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de 100 sudaneses que ha vivido en un campamento improvisado en un desierto de Irak desde 2005 llegó ayer a Amán, donde serán asistidos por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y posteriormente trasladados a Rumanía.
Los sudaneses, que huyeron de Sudán a Irak a finales de la década de 1980, serán acompañados en el viaje por personal del organismo de la ONU. Desde 2003, tras de la caída del régimen de Sadam Husein, estos refugiados han sido víctimas de abusos, extorsión y ataques por grupos insurgentes. Como consecuencia, intentaron huir de Irak, pero quedaron atrapados cerca de la frontera con Jordania.
Los sudaneses precisan la ayuda de ACNUR porque la situación en Darfur se ha deteriorado y no podrían regresar a sus hogares. Ron Redmond, portavoz en Ginebra de la agencia, señaló que los refugiados serán albergados en un centro en Rumania mientras se procesan sus solicitudes de asilo en otros países.