Actualizado 22/10/2008 15:19

El comisario de DDHH del Consejo de Europa advierte de que la situación humanitaria en Georgia sigue siendo "crítica"

Pide esfuerzos urgentes para asistir a los desplazados internos y de desminado


ESTRASBURGO, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

El comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Thomas Hammarberg, advirtió hoy en su informe tras su segunda visita a las zonas afectadas por el conflicto del pasado agosto en Osetia del Sur de que la "situación humanitaria sigue siendo crítica" y pidió a todos los actores implicados que actúen "rápidamente para aliviar el sufrimiento de miles de personas".

Según Hammarberg, a mediados de octubre más de 95.000 desplazados internos habían conseguido regresar a sus hogares, de un total estimado de 131.000, lo que supone, a su juicio, "una señal positiva". No obstante, pidió a las autoridades que "aplique de forma efectiva el principio del derecho al retorno voluntario y garanticen la seguridad y la reconstrucción de sus hogares".

"Ha habido progresos en la garantía del cuidado y el apoyo a los desplazados internos, entre ellos 20.000 personas que probablemente no podrán regresar a sus casas en el futuro próximo", prosigue el comisario en su informe, según un comunicado del Consejo de Europa.

Según el comisario, se están construyendo 2.100 unidades de alojamiento unifamiliares "que podrían suponer una buena solución provisional para los desplazados", pero consideró "crucial" que ante la proximidad del invierno "se atiendan sus necesidades de forma urgente".

Por otra parte, Hammarberg reclamo esfuerzos similares para los más de 220.000 desplazados internos previos al conflicto y subrayó que la importancia de las labores de desminado, ya que, dijo, "hay grandes cantidades de proyectiles sin explotar y bombas que todavía plantean un peligro real para la población, incluidas submuniciones de bombas de racimo".

En este sentido, indicó que es necesario "un desminado sistemático, tanto en la llamada zona de seguridad como en las zonas bajo control georgiano". Para ello, añadió, es necesaria "la plena cooperación y el que ambas partes compartan información".

Hammaberg también reclamó que se ponga fin de manera inmediata "a los saqueos y la violencia" en la zona, sin perder de vista "las preocupaciones a largo plazo, en particular lo relativo al nivel de profesionalismo y respeto de los Derechos Humanos entre las fuerzas del orden".

Por ello, consideró que "las autoridades y la comunidad internacional deben vigilar de cerca la situación sobre el terreno para detectar y desactivar cualquier rebrote de violencia o ataques étnicos".

En cuanto a los intercambios de prisioneros, Hammarberg informó de que 179 personas y 43 cadáveres fueron entregados por las autoridades de facto de Osetia del Sur a las autoridades georgianas, quienes a su vez entregaron a 41 personas y dos muertos. "Muy pronto Tsjinvali entregará diez cadáveres más a Tiblisi", precisó, pidiendo que se haga todo lo posible para encontrar a "los desaparecidos y aclarar lo que ocurrió en cada caso".

Por último, el informe, que relata el resultado de su visita a la zona entre el 25 y el 27 de septiembre, pide a las autoridades concernidas que garanticen de forma urgente que "todas las organizaciones humanitarias tienen acceso a todas las zonas, desde todas las direcciones y todo el tiempo".