BARCELONA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Salud ha suspendido cautelarmente la actividad de la empresa subcontratada por el Servicio de Emergencias Médicas (SEM) y para la que, supuestamente, trabajaba un médico, sin permiso de residencia y con el título no homologado, que pudo haber estafado 20.000 euros a una anciana de Barcelona. Desde el viernes, la empresa MH Servicios Sanitarios SL, con sede en la calle Bertran del barrio del Putxet, ya no puede realizar actividades sanitarias, por "presuntas irregularidades".
Según informó hoy la Conselleria en un comunicado, desde que el 25 de enero salió a la luz el caso, se abrió un expediente administrativo. A raíz de las inspecciones posteriores, Salud "ha podido constatar la existencia de varias irregularidades en el funcionamiento de la empresa". Por ello, y desde el viernes, se ha procedido a la "suspensión provisional y prohibición de las actividades sanitarias". Además, la suspensión cautelar se ha puesto en conocimiento del Juzgado de Instrucción número 10 de Barcelona.
Por su parte, el SEM también informó que ha suspendido cautelarmente el contrato que tenía con esta empresa. Los servicios que hasta ahora prestaba MH, serán prestados por el propio SEM y la empresa M Plus.
El SEM explicó que el promedio de demandas de atención domiciliaria desde las 17 horas y las 8 horas entre lunes y viernes --cuando operaba MH-- es de 90 visitas diarias, y los fines de semana, entre las 17 horas del sábado y las 8 horas del lunes, se realizan 200 visitas.
DETENCIÓN DEL MÉDICO.
El médico que presuntamente estafó a la anciana fue detenido por los Mossos d'Esquadra, después de atenderla como médico del 061 y ganarse su confianza para dormir en su casa. El médico, inmigrante chileno sin permiso de residencia, trabajaba sin contrato para MH, no tiene convalidado el título de médico en España, no está colegiado y utilizaba la identidad de otro facultativo.
Además, la Policía catalana también detuvo a la gerente y al director de la empresa subcontratada por el Servicio de Emergencias Médicas (SEM), MH Servicios Sanitarios SL, por un delito contra la salud pública y otro contra los derechos de los trabajadores.
El hombre, chileno de 34 años, acudió una noche de noviembre al domicilio de una mujer, de 94 años, en la calle Sepúlveda de la capital catalana. La anciana vive sola y tiene una discapacidad física que le limita la movilidad.
El médico no titulado, Marco Antonio E., acudió a casa de la mujer porque estaba indispuesta, después de que ésta llamara al 061 de urgencia. Éste le recetó medicamentos en nombre de otro colegiado y se fue.
Pocos días después volvió a la vivienda y le explicó a la anciana que no tenía lugar donde vivir porque hacía poco tiempo que estaba en Catalunya. El individuo convenció a la mujer para que le dejara vivir allí durante unos días, que se convirtieron en semanas. En este periodo, se ganó la confianza de la mujer e incluso la convenció para fijar una fecha para casarse, ya que así le facilitaría su regularización como inmigrante.
La mujer, confiada, le explicó que hacía meses que estaba en lista de espera para una operación quirúrgica. Marco Antonio E. le explicó que tenía contactos que, a cambio de dinero, le podían hacer saltar algunos puestos en la lista de espera. Convencida, la mujer se dejó acompañar hasta el banco, de donde sacó 20.000 euros en efectivo.
Al día siguiente, el médico ya no apareció, y se sospecha que pudo enviar el dinero a su país de origen. La anciana explicó los hechos a un sobrino, que le convenció para denunciar el caso ante los Mossos.
La Policía catalana detuvo al presunto estafador y, junto a los dos directivos de la empresa subcontratada, pasó a disposición judicial el domingo. El juez decretó su libertad con cargos.
SUSTITUTO DE OTRO MÉDICO.
En el registro de la sede de la empresa, en el barrio del Putxet, los Mossos sólo encontraron un currículo del sospechoso. Esto confirmaría la versión del gerente de la empresa, Carlos D.C., quien, en declaraciones a Europa Press, negó que el sospechoso fuera empleado de la compañía.
Según él, Marco Antonio E. sólo había dejado un currículo en la empresa para ofrecerse como médico, pero nunca había sido contratado porque no había puestos vacantes. Lo que sí admitió es que podía haber sustituido a un médico en alguna ocasión sin que la empresa lo supiera. Además, utilizó el número de colegiado de otro facultativo.
Por su parte, fuentes del SEM consultadas por Europa Press ratificaron que el médico detenido no formaba parte de su plantilla, sino que había trabajado en nombre de la empresa subcontratada, que mantiene su contrato con el SEM. Lo que sí harán es abrir un expediente informativo sobre el caso.
El Colegio Oficial de Médicos de Barcelona (COMB) se personará como acusación particular en el proceso, según explicó a Europa Press el secretario de la entidad, Jaume Padrós. El secretario del colegio admitió que "no se habían encontrado en una situación como ésta".
Padrós recordó que para que un médico extranjero ejerza en Catalunya ha de disponer del título y colegiarse, cosa que no ha pasado en este caso ya que el colegio no tiene constancia del arrestado, por lo que ha ejercido de "forma fraudulenta e intrusa".
El secretario del COMB remarcó que el colegio se personará en el proceso contra Marco Antonio E. por la "usurpación" del número de un colegiado y prescribir con él. Padrós dijo que, al no estar colegiado, la entidad no tiene capacidad sancionadora respecto al médico chileno.
