Espinosa subraya que decaerá el decreto "automáticamente" si hay agua para abastecer a la población de Barcelona, lo que podría saberse "en las próximas horas"
MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno negociará con partidos políticos, comunidades autónomas y ayuntamientos la consecución de un Pacto del Agua, bajo el lema 'agua para siempre', con el fin de adoptar soluciones a los problemas estruturales de déficit hídrico en España, sin descartar medidas como la interconexión de cuencas (trasvases), salvo el derogado trasvase del Ebro, según anunció hoy la ministra de Meido Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa.
Espinosa se reunió, junto con la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, con representantes del Comité de Crisis de Sequía de los Regantes del Tajo-Segura, que solicitaron un solución general de la situación hídrica en España.
"El Gobierno está dispuesto a alcanzar ese gran pacto -dijo--. Estamos dispuestos a tratarlo con las organizaciones agrarias, sindicatos, CEOE, fuerzas sociales y económicas, comunidades autónomas y la Federación Española de Municipios y Provincias. Tenemos que hacerlo partiendo de que niguna de las partes adopta posiciones dogmáticas para poder estar abiertos a todo tipo de soluciones". Ese pacto tendría tres fases: un diagnóstico sobre el déficit hídrico en cada cuenca; métodos de evaluación diagnóstica; y el estableciemiento de los recursos que se pueden utilizar para satisfacer la demanda, siempre que sean sostenibles "económica, social y ambientalmente".
FIN DE SEMANA TELEFÓNICO CON MONTILLA
Por otro lado, la titular de Medio Ambiente explicó que ha mantenido durante el fin de semana numerosas conversaciones telefónicas con el presidente de la Generalitat, José Montilla, en relación a la posible derogación del decreto de abastecimiento de agua a Barcelona y la consiguiente paralización de las obras de inteconexión de los sistemas de Tarragona y Barcelona, que no tendería "ningún sentido" de dereogarse el decreto.
"Si lee con atención el Decreto-Ley, hay dos situaciones por las que decae automáticamente la norma: a los 30 días de la entrada en funcionamiento de la desalinizadora de El Prat o si desaparecen las circunstancias que lo motivaron. Si tenemos agua para la población, automáticamente decaerá la norma", subrayó, al tiempo que aseguró que este dato podría conocerse en las "próximas horas".
CUENCAS INTERNAS, AL 55%
Así, apuntó que esta mañana las cuencas internas de Cataluña se encontraban al 55 por ciento de su capacidad y que tal vez no sería necesaria una reunión en persona con el consejero catalán de Medio Ambiente, Francesc Baltasar, sino que podría tomarse una decisión "vía telefónica y por correos electrónicos".
Espinosa quiso dejar claro que en el nuevo proceso de negociación para un Pacto del Agua no se descartan las interconexiones de cuenca porque "hablar de trasvases no significa hablar única y exclusivamente del trasvase del Ebro" que, según recordó, está "clara y rotundamente" derogado por el Plan Hidrológico Nacional. "Hay otras interconexiones que pueden ser estudiables, puestas encima de la mesa, simpre que se basen en la sostenibilidad", insistió.
LA DEMANDA HA VARIADO
En todo caso, explicó que el proceso de negociación comenzará con una fase de diagnóstico, ya que desde la puesta en marcha del Programa A.G.U.A hace unos años, la población española ha variado: se ha concentrado en algunas zonas y abandona otras. En segundo lugar, se estudiarán los métodos de evaluación diagnóstica, que incorporarán a los planes de sequía otras situaciones, como las inundaciones. En tercer lugar, se hablará de la oferta de agua (recursos disponibles, teniendo en cuenta también la posibilidad de la reutilización de aguas residuales y los avances tecnológicos) siempre desde por este orden: agua para consumo humano, agricultura y resto de usos.
Por su parte, el presidente del Comité de Crisis, Francisco del Amor, explicó que solicitaron al Gobierno una "solución definitiva" al problema del déficit hídrico estructural del sudeste de España, y que han solicitado al Gobierno la búsques de un "gran pacto del agua" y puesto sobre la mesa la solución de interconexión de cuencas. "Nos han dicho que habrá posibilidad de hacer inteconexiones", dijo.
Los regantes del Tajo-Segura también solicitaron al Gobierno un riego de socorro para no perder los cultivos que se tratará en una reunión de carácter más técnico y que se fijará a partir de mañana para después del verano. Así, Del Amor aseguró que tienen un déficit de entre 40 y 50 hectómetros cúbicos, pero que en todo caso nunca solicitarían más allá del límite del caudal ecológico de la cabecera del Tajo, fijado en 240 hectómetros cúbicos.
