Actualizado 19/05/2008 18:15

Madrid pide a Corbacho "criterios objetivos y validos" para el traslado de inmigrantes de Canarias a la Península

El consejero de Inmigración regional señaló que en los cuatro primeros meses de 2008 el 35% de los traslados ha sido a Madrid


MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Inmigración y Cooperación de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, pidió hoy al recién nombrado ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, que se establezcan "criterios objetivos y validos" para determinar los traslados de los inmigrantes llegados a Canarias a la Península porque a su juicio, hasta el momento, se han hecho "sin sentido".

El consejero, que tuvo hoy su primer encuentro con el responsable de la Administración central en materia de inmigración, aseguró que una de las peticiones que ha hecho a Corbacho es la de superar "lo que se ha venido haciendo por parte del Gobierno de Rodríguez Zapatero" en cuanto a traslados a la Comunidad de Madrid de inmigrantes llegados a las costas de Canarias, partiendo de la base de que Madrid "se siente, como Comunidad, completamente solidaria con Canarias y con los canarios".

Así, explicó que no tiene ningún criterio ni ningún sentido, "salvo que durante estos años se hubiera querido hacer las cosas deliberadamente", que el año pasado 1 de cada 3 traslados de la Península a Canarias se hiciera a la Comunidad de Madrid, y que este año, en los cuatro primeros meses, se hayan mandado a 518 inmigrantes desde Canarias a la capital de España, lo que supone un 35 por ciento del total.

"Madrid no es ni el 35 por ciento de la población, ni del territorio, ni del PIB", indicó Lasquetty, quien indicó que ante esta situación, desearía que desde el Gobierno central se tuvieran en cuenta criterios "objetivos, acordados y validos para todos que expliquen por qué hay comunidades autónomas a las que se trasladan a muchos y por qué hay otras a las que no se trasladan a ninguno".

El consejero indicó que el ministro va a estudiar esta situación y muchas otras, para cambiar la "política de opacidad y de falta de cooperación", que según Fernández-Lasquetty, ha llevado a cabo el Partido socialista en los últimos años. "Le he pedido -a Corbacho-- que cambie ese estado de cosas, porque él tiene la oportunidad de cambiar", apuntó.

En este sentido, apuntó que ha pedido que el Gobierno central se tome "más en serio acabar con el desorden" de la política de regulación de Inmigración, que se tome más en serio sus propias tareas y sus competencias y que lleve a cabo una nueva política "que supere la anteriores en cuanto a lealtad constitucional fijando criterios claros, aportando más recursos y tomándose en serio la integración".

"Venía a ver al ministro con la sensación de que se abre una nueva oportunidad, que hasta ahora por desgracia no había existido, de abrir una etapa distinta de colaboración, transparencia y coordinar criterios, y salgo con algo más de esa impresión", apostilló el consejero.

Preguntado por los periodistas sobre lo que opinaba de Celestino Corbacho, Lasquetty indicó que se trata de un ministro que conoce bien lo que es la inmigración y la integración de los inmigrantes "porque ha sido alcalde de un municipio --L'Hospitalet --con una proporción de inmigrantes muy importante". A su juicio, Corbacho no habla por los "dogmas políticamente correctos o las consignas de buen tono sino que habla del conocimiento real de las cuestiones".

POLÍTICA DE RETORNO SIN FRAUDE

En cuanto a la política de retorno incentivado bajo la formula de capitalización por prestación de desempleo que el Gobierno central quiere llevar a cabo, el consejero aseguró que la Comunidad de Madrid no está en contra de la idea "siempre y cuando se base en dos elementos, la voluntariedad por parte del inmigrante y toda la clase de garantías para que no exista lugar para el fraude".

Es decir, Lasquetty se mostró a favor de esta medida si se tienen en cuenta los detalles "para no poner en macha una política que sea novedosa e interesante y que al cabo de unos meses se haya convertido en algo desvirtual".

Por otro lado, mostró sus deseos de que acabar con el "atasco burocrático" que supone la tramitación de documentos en regla asegurando que aprecia lo importante que es cuidar el prestigio de la Ley y que en esta serie de actuaciones, "hay que hacer lo que esté al alcance para preservarlo".

"Si para una persona extranjera el hecho de mantener sus documentos en situación de regularidad, se convierte en un calvario burocrático, eso perjudica al prestigio de la Ley española y eso es muy malo porque hará innecesariamente complicado un trámite burocrático", apostilló.

Así, indicó que entra dentro de sus planes solucionar el problema de empadronamiento con el que se encuentran los inmigrantes en la región además de la concesión de permisos como en el tema de renovación de documentos y nacionalizaciones. "No entiendo que tengan que tardar tres años más en trámites burocráticos además de los dos años mínimos de residencia legal (para los procedentes de Latinoamérica) u 11 si son de otro origen", señaló.

LA COMUNIDAD RUMANA, EJEMPLO DE INTEGRACIÓN

En cuanto a su postura respecto a la política de Inmigración con la población rumana que quiere llevar a cabo el Gobierno italiano, el consejero madrileño indicó que en el caso de la Comunidad de Madrid, los rumanos son un "modelo de integración". "Lo están siendo de integración laboral, educativa, en sus barrios, en los lugares donde viven", apuntó.

Así, recordó que conforman un grupo en el que el nivel de trabajo y esfuerzo por seguir adelante y su nivel de integración esta siendo "muy satisfactorio" y que la política italiana a este respecto es un ejemplo de "cuando no se hacen bien las cosas en política de inmigración" y se hacen sobre la base de eslóganes y "no sobre la base de criterios sensatos y racionales".