Actualizado 06/06/2007 18:50

Más de 400 policías y 520 manifestantes heridos en la jornada de protestas por la reunión del G-8 en Rostock

ROSTOCK (ALEMANIA), 6 Jun. (EP/AP) -

Más de 400 agentes de Policía y 520 manifestantes sufrieron heridas en los enfrentamientos que protagonizaron ayer durante la protesta contra la próxima reunión del G-8 en la localidad alemana de Rostock, en el norte del país, según informaron las autoridades y los organizadores de la manifestación.

Además, según la Policía, 63 personas permanecen detenidas debido a los incidentes violentos, que estallaron al margen de una manifestación pacífica a la que asistieron decenas de miles de personas.

A pesar de los equipos antidisturbios, 433 agentes sufrieron heridas, de los que 30 fueron hospitalizados con huesos rotos y magulladuras, después de los enfrentamientos con unos 2.000 violentos, que arrojaron botellas y piedras, según la Policía.

Otros agentes fueron atendidos por inhalación de humo procedente de los vehículos quemados y por irritación en los ojos por los gases lacrimógenes utilizados en un intento de dispersar a los jóvenes. Mientras, según los organizadores, de los 520 manifestantes heridos, 20 tienen lesiones serias. Un activista, Mani Stenner, aseguró que más de 165 han sido detenidos temporalmente.

Hasta Rostock han llegado personas de toda Europa que quieren manifestar su oposición al denominado Grupo de los 8 países más industrializados del mundo, en unas protestas que comenzaron de manera pacífica. Según las autoridades, unas 25.000 personas se manifestaron ayer, mientras que los organizadores aseguraron que fueron 80.000.

La protesta, que fue autorizada por las autoridades, tuvo lugar a cuatro días del comienzo de la cumbre, que reunirá a los máximos representantes de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Japón, Italia y Rusia. La cumbre, de tres días, tendrá lugar en la vecina población turística de Heiligendamm, donde la canciller alemana Angela Merkel recibirá a los líderes de los otros países del bloque.

La marcha, cuya consigna era "otro mundo es posible", comenzó de manera pacífica y la mayor parte de los manifestantes continuó en calma. Pero algunos manifestantes lanzaron piedras a algunos de los policías alemanes y se colocaron pañuelos y capuchas para cubrir sus rostros y evitar ser identificados.

Un grupo de manifestantes atacó el hotel donde al parecer se alojarán miembros de la delegación estadounidense, mientras que otros destruyeron vehículos policiales con piedras, botellas de vidrio y proyectiles de pintura, dijeron las autoridades.

Docenas de grupos, entre los que había comunistas, anarquistas y medioambientalistas, lanzaron distintos mensajes durante la marcha. Algunos le pedían al G-8 mayor acción en la lucha contra el sida, la pobreza en Africa y el cambio climático, mientras que otros increpaban la existencia del G-8.

"El mundo que ha creado el dominio del G-8 es un mundo de guerras, hambre, divisiones sociales, destrucción ambiental y barreras en contra de los emigrantes y refugiados", manifestaron los organizadores en folletos que entregaban por las calles. "Queremos protestar en contra de eso y mostrar las alternativas", decían.