VALENCIA 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
La diputada socialista en el Congreso y responsable de Medio Ambiente en la comisión gestora del PSPV-PSOE, Juana Serna, aseguró hoy en un comunicado sentir "vergüenza" al ver como "mi presidente autonómico miente con el descaro y la falta de escrúpulos de los que hace gala" y le instó a "dejar de alarmar a los valencianos que en ningún momento han dejado de tener agua para beber cada vez que han abierto el grifo".
Serna instó al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, a explicar si su verdadero objetivo, con su actitud, "no es dejar morir de sed a Barcelona ya que primero criticó los trenes, luego los barcos y ahora la cesión temporal de caudales del Ebro".
Insistió en que "la fórmula aprobada para Barcelona, que no quita caudal al Ebro, es la misma que se aplica desde hace años para abastecer a Murcia y Alicante a través del Tajo-Segura con la única diferencia de que aquí ya estaba hecha la infraestructura y en Barcelona tienen que hacerla".
ACTITUD IRRESPONSABLE.
Al respecto, advirtió que la actitud "irresponsable" de Camps "puede poner en peligro esta importante fuente de abastecimiento de agua para la Comunitat" aunque consideró que con el encargo de un estudio jurídico, el Consell "admite que el espacio adecuado para el debate político no es la calle".
En este sentido se felicitó por la "marcha atrás" dada por el PP valenciano a las movilizaciones contra la cesión de agua del Ebro a Barcelona para hacer frente a la sequía y dio la bienvenida "al presidente del Consell y del PP valenciano, Francisco Camps, al "ámbito de la cordura".
De esta forma la diputada socialista valoró el anuncio del vicepresidente del Consell, Vicente Rambla, sobre el encargo de un informe jurídico sobre la transferencia de agua del Ebro a la ciudad condal. "Por fin parece que el PP valenciano se ha dado cuenta de que el espacio para defender sus posiciones no son las calles", afirmó.
Serna consideró que el anuncio del informe jurídico encargado por el Gobierno valenciano "es la manera del PP de salirse de la vía de las movilizaciones" y subrayó que el propio Rambla renunció a "pedir a la gente que salga a la calle".
Asimismo, valoró que el estudio de acciones legales para hacer extensible una decisión como la de Barcelona a la Comunitat "implica que el Consell asume que es la mejor solución en el caso de que en el futuro se dieran una situación de emergencia como la que afecta a la capital catalana", según indicó.