Publicado 18/02/2019 13:46

El Hospital Universitario Torrecárdenas mejora la gestión logística con la implantación de tecnología digital

Dos profesionales sanitarios emplean un sistema tecnológico
JUNTA DE ANDALUCÍA

ALMERÍA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Hospital Universitario Torrecárdenas ha comenzado a implantar una nueva tecnología para mejorar la gestión de sus almacenes intermedios, así como la eficiencia y la reposición de material; una innovación en el ámbito de la gestión logística mediante la tecnología RFID --siglas en inglés de identificación por radiofrecuencia-- que facilita el control del material disponible y permite al personal dedicar más tiempo a tareas asistenciales.

Según expone la Delegación Provincial de Salud y Familias en una nota, la tecnología RFID es una forma de comunicación inalámbrica entre un lector y un emisor. Se emplea desde hace años en el ámbito sanitario para aspectos como el seguimiento del paciente o la trazabilidad de las bolsas de sangre.

El Hospital Universitario Torrecárdenas ha comenzado su implantación para mejorar la gestión de las solicitudes y las reposiciones de material fungible sanitario en cada una de sus plantas. El centro cuenta con un total de 40 almacenes intermedios, que facilitan un acceso rápido a los suministros que necesita cada especialidad y cada servicio para prestar atención a sus pacientes y que se abastecen gracias a un almacén central.

Para incorporar la tecnología RFID al suministro de fungible en los almacenes intermedios se ha optado por la utilización de un sistema de doble almacenamiento (denominado Kanban), dotado con un sistema con lectura automática por radiofrecuencia a través de unos buzones RFID.

El sistema Kanban se basa en que cada producto y material fungible se encuentra almacenado en dos cajones, que contienen la misma cantidad de material. El cajón anterior está marcado con una tarjeta verde y el cajón trasero o posterior está marcado con una tarjeta roja.

Cuando se acaba el material del primer cajón el personal sanitario extrae la tarjeta verde, depositándola en el buzón RFID y continúa consumiendo el material almacenado en el segundo cajón. Si se agota el material de ese segundo cajón, se extrae la tarjeta roja, depositándola igualmente en el buzón.

La tecnología con la que cuentan estos buzones permite que cuando los profesionales introducen estas tarjetas un sistema automático alerta al almacén central de la necesidad de reponer el material. Los pedidos llegan de forma inmediata al almacén central según las programaciones horarias de cada planta. La simplicidad del sistema hace que sea realmente operativo, proporcionando mayor eficiencia y eficacia en el proceso de reposición.

Con él se evitan las roturas de 'stocks', se facilita el control del material y se elimina el trabajo administrativo innecesario, lo que permite a supervisores y celadores poder dedicar más tiempo a las labores asistenciales

Actualmente los buzones RFID están funcionando completamente en la sexta planta del hospital y se irán poniendo en marcha paulatinamente en todo el hospital en un plazo máximo de dos meses. Para su instalación se están renovando las redes de cableado digital de cada planta.