LEBRIJA (SEVILLA), 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural respalda una inversión público-privada global de 2,8 millones de euros para nuevos regadíos en el Sector B-XII del Bajo Guadalquivir, que se traducirán, en palabras del consejero del ramo, Rodrigo Sánchez Haro, en "fijación de la población al territorio, el mantenimiento de unos pueblos vivos y un sector agroalimentario sostenible y competitivo".
Por consiguiente, el consejero ha entregado a esta comunidad de regantes, en Lebrija (Sevilla), una resolución de ayuda por valor de un millón de euros para respaldar la puesta en riego de otras 600 hectáreas, según un comunicado de la Junta.
Sánchez Haro ha enmarcado este apoyo dentro del compromiso del Gobierno andaluz con un regadío sostenible como "motor de desarrollo y generador de oportunidades". No en vano, la Consejería de Agricultura ha puesto en marcha una convocatoria dirigida a comunidades de regantes, juntas centrales de usuarios y comunidades generales para nuevos proyectos declarados de interés general para la comunidad autónoma con una dotación de 20 millones de euros.
El regadío andaluz, "gran impulsor y dinamizador de nuestra agricultura y nuestra industria", ha insistido Rodrigo Sánchez, supera los 1,1 millones de hectáreas. La cifra, a su juicio, "no es baladí", en la medida en que supone un tercio de la superficie cultivada de toda la región.
Este sistema representa, en este sentido, más del 60 por ciento de la producción de la rama agraria y más del 63 por ciento del empleo generado por la actividad agrícola en Andalucía. El titular del ramo no ha dudado en felicitar a la comunidad de regantes del Sector B-XII del Bajo Guadalquivir "por su carácter emprendedor y su contribución a la diversificación social y económica de la comarca".
Es, desde su punto de vista, "parte de los cambios que ha experimentado el regadío en Andalucía", que, "sobre la base de una apuesta decidida por la eficiencia, mejora el bienestar de la gente mediante la generación de empleo y riqueza". El avance, ha proseguido, es "palmario", en forma de una "importante transformación con una mayor iniciativa empresarial y un efecto multiplicador sobre otras actividades anexas".
Se trata, en definitiva y según ha apostillado Sánchez Haro de unos regadíos que han impulsado una agricultura "dinámica y especializada" para erigirse en la principal actividad económica del entorno de Lebrija. "Disponemos ahora de explotaciones más competitivas, riegos eficientes y producciones de gran valor económico, destinadas a unos mercados cada vez más exigentes". Éste es, ha concluido, "el camino por el que hemos de seguir".
SECTOR B-XII
La comunidad de regantes del Sector B-XII del Bajo Guadalquivir fue constituida en 1979 y se adscribe al municipio de Lebrija. Con un total de 1.128 comuneros, contabiliza hasta 14.643 hectáreas regadas, dedicadas, en su mayoría, a cultivos como el algodón (33%), el tomate (22%), la remolacha (15%), el maíz (7,6%) y el trigo (5%).
Ubicada en la parte más meridional de la antigua marisma del margen izquierdo del Guadalquivir, ocupa el 85 por ciento de la superficie de algodón cultivada en el término municipal.
APOYO A LA COMARCA
El consejero ha hecho mención a los "numerosos incentivos" que han tenido como destino al ámbito de la Oficina Comarcal Agraria (OCA) de Lebrija.
En concreto, dentro del esfuerzo para impulsar el relevo generacional en el campo, hasta 57 jóvenes de la zona se han beneficiado de 3,7 millones de euros para su instalación en explotaciones agrarias, mientras que la línea de modernización del tejido agroindustrial ha derivado en una inyección de 1,1 millones de euros más.
Todo ello, sin olvidar los 600.000 euros que se dirigen cada año a Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH) para inversiones de mejora. El Grupo de Desarrollo Rural (GDR) del Bajo Guadalquivir cuenta, a su vez, con una asignación de 4,4 millones de euros para el periodo 2014-2020 y ha recibido más de 90 proyectos emprendedores.
