El Ayuntamiento advierte de que, si no se consiguen compromisos de financiación, se podría retrasar la vuelta del resto de desalojados
BILBAO, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
Unas 70 familias de Ondarroa (Bizkaia), de las 176 desalojadas de sus viviendas el pasado mes de marzo por el desprendimiento de tierras de la ladera de Kamiñalde, volverán a sus casas el próximo viernes, según han anunciado esta tarde el alcalde de Ondarroa, Zunbeltz Bedialauneta, y la concejala de Urbanismo, Eneritz Basurko, en una asamblea con los afectados.
En la asamblea celebrada en la Cofradía, donde se ha detallado la información sobre la financiación de las obras de Kamiñalde y la apertura de la calle de San Ignazio, el Ayuntamiento ha asegurado que el próximo viernes, día 29, a las once de la mañana, se abrirá la calle San Ignazio. Ese mismo día, hasta las 20.00 horas de la tarde, el acceso se restringirá únicamente a las familias desalojadas, para que puedan hacer los traslados.
Según ha informado el Consistorio, a partir de esa hora, estará la calle abierta al tráfico con normalidad. Se estima que serán unas 70 familias las que volverán a sus domicilios. Estas familias tendrán una semana de plazo para el traslado de sus enseres y abandonar las viviendas en las cuales han estado realojadas estos últimos meses.
FINANCIACIÓN DE LAS OBRAS DE KAMIÑALDE
Las obras para reparar los daños causados por el desprendimiento de tierra y rocas de Kamiñalde ascienden a 17 millones de euros. En esta cifra están contemplados los trabajos para retirar la tierra desprendida de la ladera, el desmonte, los gastos de las expropiaciones de los terrenos en los cuales se ha acumulado la tierra y reparar los daños causados en las viviendas.
Como se ha destacado en la asamblea, actualmente el Ayuntamiento de Ondarroa está negociando para poder lograr un mayor compromiso para la financiación de las obras con la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno vasco. Hasta ahora, el Ayuntamiento de Ondarroa ha recibido cinco certificaciones enviadas por la UTE que está llevando a cabo las obras.
Estas cinco certificaciones suponen un importe de 6 millones de euros, de los cuales 2,5 millones de euros ya están abonados (2 millones de euros por el Ayuntamiento de Ondarroa y 0,5 millones por la Diputación Foral de Bizkaia).
El primer edil ha apuntado que la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno vasco están negociando para poder llegar a un mayor compromiso para la financiación de las obras de Kamiñalde. Por ahora, el Ayuntamiento de Ondarroa ya tiene prevista una partida en el presupuesto municipal del 2016 de 2 millones de euros para estos gastos.
También cabía la probabilidad de incorporar una nueva partida, pero el Consistorio lo ve "imposible", dado que recientemente se ha hecho pública una sentencia firme referente al litigio con la conservera que antaño se ubicaba en Kamiñazpi, obligando a un pago de 2,6 millones a medias, tanto al Ayuntamiento como a la Diputación Foral de Bizkaia.
Al mismo tiempo, el Ayuntamiento de Ondarroa está en contacto con la UTE que está ejecutando las obras. "Si no hay compromiso firme a la hora de la financiación, la obra no se parará, pero es probable que los trabajos se ralenticen y por consiguiente se demore la vuelta de las familias desalojadas", ha advertido.
REALOJOS
Por otra parte, el Ayuntamiento de Ondarroa ha dado a conocer que ha solicitado a Alokabide que gestione la ubicación en las viviendas que quedarán disponibles a las 10 familias afectadas que están todavía a la espera del realojo. Alokabide ha asumido el pago del alquiler de estos seis meses y ha propuesto cobrar 250 euros de alquiler al mes a las familias que por ahora no pueden volver a sus domicilios.
Entre las familias desalojadas y reubicadas hay situaciones "complicadas económicamente", por lo cual el Consistorio y los afectados han pedido a Alokabide una reunión para analizar los casos al detalle.
