BILBAO, 11 May. (EUROPA PRESS) -
Los aficionados al rugby, tanto extranjeros como de otras comunidades autónomas, han disfrutado de Bilbao durante las horas previas a la celebración del primer encuentro de las finales europeas, la Challenge Cup y la Champions Cup de Rugby 2018, que se desarrollarán hasta el sábado.
La capital vizcaína espera la llegada de unos 100.000 aficionados franceses, irlandeses y galeses, que desde este pasado jueves tienen a su disposición en El Arenal una "Fan Zone".
Además de las carpas habilitadas con consumiciones y comida, los stands han puesto a la venta camisetas o balones. Otros ofrecen juegos, entre los que destaca el que enseña cómo lanzar un balón a la ría de una patada o la forma de levantar un fardo de 45 kilogramos de peso.
Los aficionados, algunos con las camisetas de su equipo, han recorrido las zonas cercanas a la ría y el Casco Viejo, donde muchos han entonado el himno de sus equipos.
Mientras los visitantes han disfrutado de las primeras horas de la jornada, muchos bilbaínos han expresado sus quejas por la subida de los precios que muchos establecimientos han aplicado ya a sus productos, con motivo de la celebración de las finales de rugby.
