Atentados.-Aralar los rechaza y recuerda que "la solución está en el diálogo y la profundización democrática"

Actualizado: domingo, 21 septiembre 2008 14:36

SAN SEBASTIAN, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

Aralar rechazó Los atentados perpetrados por ETA esta madrugada con dos coches bomba contra la sede de Caja Vital en Vitoria y la Comisaría de la Ertzaintza en Ondarroa (Bizkaia) y recordó que "la solución está en el diálogo y la profundización democrática".

En un comunicado, Aralar reprobó los últimos ataques de ETA y mostró su "solidaridad" con las personas heridas y afectadas por los mismos. Además, pidió a la banda terrorista "un cese de la actividad armada unilateral y sin contraprestaciones", puesto que "la solución del conflicto en Euskal Herria vendrá con diálogo y profundización democrática, y en ningún caso, con atentados y la conculcación de Derechos Humanos".

Aralar destacó la "necesidad" de la "unilateralidad" del cese de la violencia de ETA, en la medida en la que "supone un grave ataque contra los Derechos Humanos" y un "obstáculo para los intereses de los abertzales". A su juicio, la consecución de "la paz" a cambio de "contraprestaciones cerraría las puertas a las reivindicaciones de los independentistas", en la medida en que el Gobierno central "daría por agotadas las vías de reclamación para otras reivindicaciones".

Por el contrario, consideró que la "unilateralidad del cese de ETA, sin contraprestaciones" supondría "un paso para una paz de la sociedad de Euskal Herria". Según Aralar, en un escenario "de paz se legitimarían aún más las de por sí legítimas reivindicaciones de la ciudadanía", se "cargaría de argumentos las reclamaciones futuras" y se "desterraría las injustificables motivaciones que encuentra el Gobierno, para cercenar derechos políticos y civiles escudándose en la utilización de la violencia política".

Desde su rechazo a las sentencias de ilegalización de ANV y EHAK y la oposición a la aplicación "restrictiva" de la Ley de Partidos, Aralar reclamó una vez más el "cese unilateral de la violencia de ETA no como réplica", sino como "un hecho autónomo por que eso es además de justo, lo que conviene a Euskal Herria, a los presos y a las víctimas".