Los accionistas se reunirán el 7 de septiembre con los sindicatos para explicarles la situación del astillero
BILBAO, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
El comité de empresa de La Naval de Sestao ha asegurado que el concurso de acreedores que la Junta de Accionistas del astillero ha acordado solicitar ante la falta de inversores que puedan suscribir la ampliación de capital, "no es una solución" y "puede llevarse por delante" a muchas pequeñas empresas de la Margen Izquierda.
Según han manifestado a Europa Press fuentes del comité, tras adoptarse la decisión en la reunión que la Junta de Accionistas de la empresa ha celebrado con carácter extraordinario en el astillero, el director general de la compañía ha trasladado la noticia al órgano de representación de los trabajadores.
El comité considera que, "lejos de ser la solución", el concurso de acreedores "puede convertirse en un problema muy grave" porque "se sabe bien cómo se entra, pero no cómo se acaba". Las fuentes consultadas aseguran que la dirección les ha aclarado que el concurso será en continuidad, pero, en su opinión, "se puede llevar por delante a muchas empresas pequeñas de la Margen Izquierda y del tejido industrial vasco".
El comité está pendiente todavía de conocer los detalles sobre la situación del astillero, si bien la Junta de Accionistas, a la que este mismo miércoles habían solicitado una reunión, se ha comprometido a explicarles los detalles en un encuentro que se celebrará el próximo 7 de septiembre.
La intención de los sindicatos es recabar el apoyo de los partidos políticos e instituciones. Con este objetivo, el comité ha cerrado ya encuentros con las dos formaciones que integran el Gobierno vasco, PNV y PSE-EE, con las que se reunirá el próximo lunes, 4 de septiembre.
"DATOS EN LA MANO"
También pretenden mantener encuentros con responsables del Ejecutivo autónomo, antes de decidir, "con todos los datos en la mano", si inician o no movilizaciones.
Mientras tanto, los trabajadores continuarán con las labores de construcción de los cuatro buques incluidos en su cartera de pedidos, el más avanzado el cablero para la firma holandesa Tideway, al que le quedan siete meses para estar concluido.
En la actualidad, trabajan en La Naval alrededor de 230 trabajadores, a los que se suman los 300 de la industria auxiliar, con lo se elevan a unos 500, "cuando en realidad debían estar trabajando unos 1.500 o 1.800".
La Naval se encuentra en preconcurso de acreedores -con vencimiento el 7 de octubre- y, hasta este miércoles, pendiente de que un inversor que suscribiera de forma mayoritaria la ampliación de capital de 42 millones, necesaria para su viabilidad.
Pese a que el inversor asturiano afincado en Miami, Manuel del Dago, se había comprometido a adquirir el 80% del astillero, agotados los plazos solicitados, finalmente no ha suscrito la ampliación. La Junta de Accionistas, reunida de forma extraordinaria, ha decidido solicitar el concursos de acreedores.
