Las inversiones y las transferencias de capital aumentaron en 2019 un 7,9% y alcanzaron la cifra de 1.728 millones de euros
BILBAO, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La deuda viva de las Administraciones Públicas de la Comunidad Autónoma Vasca -formadas por el Gobierno Vasco, las diputaciones forales y las administraciones municipales, junto a sus correspondientes Organismos Autónomos y Entidades supra e inframunicipales- alcanzó a 31 de diciembre de 2019 los 10.988,6 millones de euros, un 13,8% del PIB, frente al 15,0% a 31 de diciembre de 2018, según datos elaborados por Eustat.
Los nuevos pasivos contraídos en 2019 ascendieron a 1.131,9 millones frente a 1.706,1 millones de las amortizaciones. Además, destaca, en el último ejercicio, que el importe pendiente de amortizar se reduce en 574 millones de euros, lo que ha supuesto un descenso de 1,2 puntos porcentuales.
Del total de la deuda viva pendiente de amortizar a finales de 2019, la del Gobierno Vasco supone el 78,7%, seguida por Bizkaia con un 11,6%, Álava con el 5,3% y, finalmente, Gipuzkoa con el 4,4% restante.
Por instituciones, tanto el Gobierno Vasco como las Administraciones territoriales (diputaciones y entidades locales) registraron saldos presupuestarios no financieros positivos, aunque disminuyen respecto al año 2018.
En concreto, el Gobierno Vasco registró un saldo positivo de 394 millones de euros, disminuyendo en 53 millones de euros en relación al registrado en 2018. Los tres territorios históricos mantienen esta tónica, con saldos positivos, pero menos favorables que en el año anterior.
Si se pasa al detalle de los gastos e ingresos incurridos por las Administraciones Públicas de Euskadi, el gasto total ascendió a 19.186 millones de euros en 2019, un aumento del 6,2% respecto al año anterior. Por su parte, los ingresos alcanzaron los 19.022 millones, bajando un 0,1% respecto a 2018.
En cuanto a las operaciones no financieras, tanto los ingresos como los gastos presentaron evoluciones positivas. Así, los ingresos aumentaron un 2,5% respecto a 2018 y los gastos se incrementaron un 4,3% y, como consecuencia, el saldo presupuestario no financiero se situó en los 900 millones de euros en 2019, frente a los 1.164 millones de euros en 2018.
Por su parte, respecto al análisis de las operaciones financieras, se observan evoluciones contrarias, de forma que mientras los ingresos financieros cayeron un 29,4% hasta alcanzar los 1.126 millones de euros, los gastos financieros alcanzaron los 2.191 millones de euros, lo que representó un aumento del 23,4%.
El crecimiento de los ingresos no financieros se sustentó en la positiva evolución de los ingresos corrientes (3,2%), que supusieron el 93,3% del total de ingresos. Los ingresos por operaciones de capital, con un pequeño peso, registraron una bajada del 41,2%.
Los ingresos impositivos, que en 2019 acapararon el 85% de los ingresos totales, tuvieron prácticamente todos ellos un comportamiento positivo respecto al año anterior, a excepción del impuesto de sociedades y los municipales.
En conjunto, los ingresos impositivos crecieron un 2,9%. El IVA y el IRPF son las figuras impositivas de más peso dentro de los ingresos impositivos y aportan el 37,3% y 35,5%, respectivamente, a la totalidad de los mismos. Ambos registran una evolución positiva, del 5,9% en el caso del IRPF, y del 2,6% en el del IVA.
En tercer lugar, en importancia relativa, figuran los Impuestos Especiales con un crecimiento del 11% y, finalmente, con un aumento del 2,8%, están los Otros Impuestos, aunque su peso es mucho más pequeño (4,1%).
Con evolución negativa, está, por una parte, el Impuesto de Sociedades, que supone el 8,4% de los Impuestos y en este ejercicio registra una evolución negativa cifrada en el 12% y, por otra, los Impuestos Municipales que también registran un retroceso, aunque de menor entidad (-1%).
Los Otros ingresos corrientes -que comprenden tasas, transferencias e ingresos patrimoniales, entre otros- supusieron el 8,9% del total de los ingresos por operaciones corrientes y registraron un aumento del 5,9%.
En cuanto a los gastos corrientes, sufrieron un aumento del 4%. Este incremento viene motivado, principalmente, por la partida de los gastos de personal, con un peso del 20,5% sobre el total de gastos y que aumentaron un 5,7% respecto al año 2018. Presentan también evolución positiva los Otros gastos corrientes, que acumularon el 31,5% del gasto total y crecieron un 4,2%.
Finalmente, los Transferencias corrientes crecieron un 2,4%. Por su parte, los gastos en Inversiones y Transferencias de capital, que representaron el 9% del total, han registrado un crecimiento del 7,9% respecto a 2018, cuantificándose en 126 millones más.
