Gobierno vasco completará mañana el apagón analógico en Gipuzkoa con el fin de la actividad del repetidor de Jaizkibel

Actualizado: lunes, 22 marzo 2010 15:14

SAN SEBASTIAN, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Departamento de Justicia y Administración Pública del Gobierno vasco completará mañana el apagón analógico en Gipuzkoa, una vez que apague definitivamente el repetidor del monte Jaizkibel que da servicio a San Sebastián y a su área metropolitana.

En un comunicado, el Ejecutivo vasco explicó que a lo largo de la jornada de mañana la torre de Jaizkibel dejará de emitir la señal analógica y en su área de influencia se dejará de ver definitivamente la televisión 'convencional'.

Según apuntó, el de Jaizkibel es el principal repetidor de Gipuzkoa y presta cobertura a más de 200.000 personas. Su apagado culminará el proceso de transición a la TDT (Televisión Digital Terrestre) que, en este territorio histórico, comenzó el pasado mes de enero con la desconexión de varios municipios de las comarcas de Alto y Bajo Deba, y de Urola-Kosta.

El pasado día 10 comenzó la definitiva tercera fase del apagón, que afecta a los centros incluidos en el Proyecto Técnico de Jaizkibel. El cese de emisiones se ha producido de forma gradual, empezando por los centros emisores de menor afección poblacional y aquellos cuyas señales dependen, jerárquicamente, de centros más importantes.

Esta fase llega a su fin con el cese de emisiones de los centros de Usurbe, Oiaun, Igeldo y Jaizkibel. De este modo, todo el territorio de Gipuzkoa estará mañana digitalizado.

Para recibir la señal de la TDT será preciso adaptar las antenas comunitarias y contar en cada aparato de televisión con un decodificador de la señal digital. Además, para garantizar que la oferta televisiva de las cadenas de ámbito estatal llegue al 100 por cien de la población en Euskadi, el Gobierno Vasco ha firmado convenios con las tres diputaciones forales y Eudel.

En el caso de Gipuzkoa, esto ha supuesto extender la cobertura de esas cadenas en más de 80 centros reemisores. Esta extensión se ha encargado a la sociedad pública de telecomunicaciones Itelazpi, que ha instalado los últimos reemisores pendientes.