BILBAO 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Hostelería de Bizkaia ha afirmado que el rechazo a cualquier conducta inadecuada, actitud vejatoria hacia la mujer (tocarlas lascivamente o intimidarlas), beberse las consumiciones de otras personas, robos organizados dentro de los establecimientos, amenazas permanentes a porteros, "no debe ser utilizado como argumento de xenofobia o racismo, ya que estas conductas (utilizadas especialmente por algunas personas de origen magrebí) generan el malestar existente y producen un rechazo general hacia personas con este origen (a pesar de que sólo sean unos pocos del colectivo que vive entre nosotros)".
En un comunicado, la Asociación de Hostelería de Bizkaia ha informado de que se ha reunido este martes con representantes de SOS Bizkaia, organización que ha denunciado limitaciones de acceso a establecimientos hosteleros a personas de otras etnias o razas.
En el encuentro, mientras desde SOS Racismo se ha defendido que no cabe mezclar conceptos de admisión con las conductas que puntualmente puedan producirse por parte de cualquier persona, los hosteleros consideran que "determinadas situaciones al final desembocan en conductas que nunca deberían haber existido".
Además, los hosteleros han presentado un "Decálogo de Actitudes" (para Autóctonos e Inmigrantes), en el que señalan que "cualquier discriminación en el acceso y trato a las personas por cuestión de su raza o etnia deberá denunciarse y llegar hasta las últimas consecuencias".
De la misma manera, apuntan que "cualquier denuncia falsa, utilizando el victimismo, aduciendo razones de xenofobia o racistas cuando el fondo es en realidad un mal comportamiento o actitud delictiva que se aplica a todos los clientes, debería finalizar con la denuncia a esa persona, incluso por las propias organizaciones que los representan".
Asimismo, indica que "cualquier conducta inadecuada, actitud vejatoria hacia la mujer (tocarlas lascivamente o intimidarlas), beberse las consumiciones de otras personas, robos organizados dentro de los establecimientos, amenazas permanentes a porteros, debe ser totalmente rechazada incluso por las organizaciones de defensa al inmigrante".
En otro punto del decálogo se afirma que "cualquier ciudadano que salga a la calle con armas, debería ser perseguido penalmente, las haya utilizado o no: es inaceptable que alguien pueda salir a disfrutar de un ocio nocturno con cualquier tipo de arma". "Si el causante de ello estuviera en situación irregular, debería ser inmediatamente expulsado del país, y perder cualquier tipo de apoyo o ayuda que estuviera disfrutando", añade.
Otro punto señala que "cada queja por discriminación se deberá estudiar pormenorizadamente antes de realizar la pertinente denuncia y comunicación a los medios, y se tendrá en cuenta la reincidencia tanto del establecimiento como del denunciante, evitando caer en el victimismo y que se utilice como venganza personal, como coacción para obtener beneficios o para ocultar actos delictivos".
Además, considera que "acceder, disfrutar y hacer uso de las instalaciones de una manera gratuita y sin consumir no puede ser potestativo del usuario: los establecimientos tienen un aforo determinado y, desde esa perspectiva, es lógico que exijan que cualquiera que acceda a los mismos tenga la obligación de consumir, dejando a criterio de la empresa si lo hace a través de un pago de una consumición mínima en el acceso o inmediatamente tras el servicio".
La Asociación de Hostelería reconoce que las reflexiones contenidas en su decálogo "nacen esencialmente de un conjunto de incidentes vinculado a personas de origen magrebí, no habiendo surgido problemas ni parecidos ni similares con colectivos procedentes de otras zonas, como podrían representar los ciudadanos orientales o del centro de Europa".
En este sentido, insta a reflexionar de que "no es normal que existan meses en que el 80 por ciento de los delitos pueden estar imputados a un 10 por ciento de la población; o de que no es normal que propietarios e inmobiliarias huyan de establecer un arrendamiento inmobiliario con determinadas personas y lo mismo cabría aplicar a operaciones mercantiles con determinados negocios hosteleros".