SAN SEBASTIÁN, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El jurado ha declarado culpable de asesinato al acusado del crimen de un hombre que murió tras recibir 41 puñaladas en la madrugada del 14 de marzo de 2020 en la Plaza de Cataluña del barrio de Gros de San Sebastián y no considera probado que estuviera bajo los efectos de las drogas. Además, absuelve a la acompañante de éste al considerar que "actuó por miedo" de que les hiciera algo a su familia o a ella.
El juicio, que comenzó el pasado 21 de febrero en la Sección Tercera de la Audiencia de Gipuzkoa y se ha prolongado durante dos semanas, ha concluido este martes con el veredicto emitido por el Tribunal del jurado.
La Fiscalía de Gipuzkoa pedía una pena de 25 años de cárcel por asesinato para el acusado por estos hechos, un joven de 27 años de origen cubano, mientras que la acusación particular que ejerce la familia de la víctima solicitaba 30 años de cárcel, al considerar la agravante de ensañamiento por parte del presunto autor.
Además, acusaba de encubrimiento a la acompañante del acusado en el momento de los hechos y pedía para ella un año y medio de cárcel. La joven ha sido finalmente absuelta de estos cargos.
Los hechos sucedieron a las seis de la mañana del 14 de marzo de 2020 en el parque infantil ubicado en la plaza Cataluña de Gros. La víctima, un vecino de San Sebastián de, entonces 46 años, fue acuchillada reiteradamente.
El acusado, de 25 años de edad y con antecedentes policiales, fue detenido en abril de ese mismo año en la capital guipuzcoana por agentes adscritos al Servicio de Investigación Criminal Territorial de la Ertzaintza en Gipuzkoa (SICTG) como presunto autor del homicidio.
También fue arrestada su acompañante, una mujer de 28 años de edad, residente en Gipuzkoa, por un presunto delito de encubrimiento. El desencadenarte de la agresión derivó de un incidente previo, ocurrido minutos antes en el interior de un establecimiento hostelero cercano a la Plaza Cataluña, entre la víctima y su agresor.
El acusado y su acompañante al parecer abandonaron después precipitadamente el bar y se dirigieron al domicilio de él, donde éste se cambió de ropa, cogió un cuchillo de cocina y volvió al interior del establecimiento. Presuntamente, tras localizar a su víctima e interactuar con ésta durante escasos minutos, ambos varones abandonaron el local y accedieron a pie a la calle Gran Vía.
Una vez allí, en el parque infantil ubicado en las proximidades, el agresor presuntamente asestó a la víctima 41 cuchilladas, en diferentes lugares de su cuerpo, que provocaron su muerte.
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