Kutxa y Cámara de Gipuzkoa acompañan financieramente a las empresas en su internacionalización a través de Kufinex

EP

SAN SEBASTIAN 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

Kutxa y la Cámara de Comercio guipuzcoana están acompañando financieramente a las empresas en su salida a mercados exteriores a través de la sociedad Kufinex, en la que participan en un 30 y 40 por ciento respectivamente con un capital inicial de 600.000 euros, porque la internacionalización es "lo que garantiza la competitividad", según ha afirmado el presidente de la caja guipuzcoana, Xabier Iturbe.

Esta herramienta de asesoramiento financiero a sociedades radicadas en el País Vasco con el objetivo de estructurar la financiación de sus exportaciones y de su posible implantación internacional, se constituyó en junio del pasado año y este martes se ha presentado al mundo empresarial en un acto celebrado en el KutxaEspacio de la Ciencia en San Sebastián en el que han intervenido, además de Iturbe, el presidente de la Cámara, Pedro Esnaola, el de Kufinex, Javier Zubia.

Además, Josu Ugarte de Mondragon Corporación e Iñigo Juaristi del Grupo Sarralle han trasladado a los presentes las experiencias en internacionalización de estos grupos empresariales. Iturbe ha reiterado el compromiso "estratégico" de Kutxa con la internacionalización de las empresas que es "lo que garantiza la competitividad".

El presidente de Kutxa ha destacado que si el tejido empresarial está bien también lo estará el financiero, idea en la que se enmarca la creación de Kufinex que es una "realidad que está ya funcionado".

Esnaola ha calificado esta nueva sociedad como una herramienta "anticíclica" que busca "dar respuesta al nuevo reto que plantea" la globalización, desde la visión de que Gipuzkoa y sus empresas "tienen que ser capaces de generar riqueza". Además, ha explicado que Kufinex parte de la reflexión sobre la necesidad existente por parte de las empresas de recabar financiación y estructurar las operaciones financieras de sus proyectos internacionales.

Ugarte ha explicado que antes Euskadi era un país "de bajo coste" y exportaba "con mucha facilidad", pero los diferenciales de coste de entre 3 y 5 por ciento con respecto a otros países "se han tenido que enfrentar a países emergentes con diferenciales de coste del 30 por ciento, por lo tanto hay que buscar ser competitivos en otros aspectos".

Además, ha destacado el crecimiento de China, un país que da lugar a 1,8 millones de ingenieros al año, frente a los 3.400 de Euskadi, con unos costes de mano de obra de 1,2 euros/hora, e incluso del 0,4 euros en el interior del país y una exportación de en torno al 40 por ciento. Según ha indicado la rentabilidad de las empresas china dobla la de las compañías que están en los índices bursátiles.

Según ha indicado el país asiático consumía en 2008 un 28 por ciento de máquina herramienta y en 2010 un 46 por ciento, más que los diez países siguientes juntos, lo que refleja que "toda la industria se va allí", ha destacado, para añadir que, además, su inversión en innovación es de un 2,5 por ciento del PIB, que alcanza los 6 mil millones de dólares.

Ugarte ha apuntado que la apuesta china pasa por "los costes, la marca y la tecnología". El impacto de este país, se suma unas "macrotendencias visibles" que apuntan al envejecimiento de la población europea, el crecimiento de las energías limpias, nuevas formas de gobernanza, la multipolaridad, la conciencia social y medioambiental, la rapidez en la toma de decisiones en los países emergentes y el hundimiento del mercado de nuestras empresas, ha explicado.

En cuanto a este último, ha apuntado que las empresas vascas abordaban el 80 por ciento de su mercado, que "se ha hundido" al incrementarse, y ha indicado que cuando un consumidor tiene una experiencia con un producto opta por comprar más barato, y así ahora se aborda el 60 por ciento, mientras que el de China "va a crecer muchísimo" con una previsión de crecimiento del PIB entre 2010 y 2015 del 74,4 por ciento, frente al 6,6 por ciento de España.

OPORTUNIDAD

Frente a todo esto, a su juicio, se presenta la "oportunidad" de la aparición de una nueva clase media mundial con ingresos de entre 6.000 y 30.000 dólares anuales, a la que se prevé se incorporen 70 millones de personas al año hasta el 2010, de ellas 35 millones en China.

En este sentido, ha explicado que en mercados con un gran crecimiento las empresas no suelen entrar en guerra de precios, de aquí que éste nuevo suponga una ocasión "única". Por otro lado, a la hora de abordar procesos de internacionalización ha destacado la importancia de la diplomacia corporativa, gente que proteja los negocios y estructurar los proyectos.

"Se necesita gente muy preparada, sobre todo desde el punto de vista de la multiculturalidad, humilde y con determinación para ir al exterior", que tenga "empatía" y así genere "confianza", ha indicado, para subrayar, a continuación, la importancia de que sea capaz de hablar en el idioma del país en el que la empresa pretende implantarse.

Además, ha subrayado que la multilocalización en países de bajo coste es "clave" para incrementar las exportaciones y ha aseverado que "la apertura de fábricas en el exterior sirve para incrementar el empleo y, por tanto hay que dejar de lado las teorías de la deslocalización".

Según ha indicado en las empresas locales se pierde un 2,7 por ciento de empleo al año mientras que en las multilocalizadas crece un 1,5 por ciento. También ha considerado relevante tener estudios de mercado "muy bien hechos" sobre los países emergentes, "muy cambiantes", realizados por gente senior.

Pos su parte Juaristi ha explicado la implantación Sarralle, dedicada a la fabricación de hornos y equipos para acerías, en India, a través de la creación de una joint vnture con un promotor, y próximamente en Brasil, Irán y Rusia.

El representante del Grupo Sarralle ha emplazado a las pequeñas empresas vascas a salir al exterior, aunque ello suponga "una mayor complejidad", y a las entidades financieras a poner a la disposición de las compañías financiación.